Para que nadie quede atrás: a la memoria de nuestras(os) compañeras(os) y maestras(os)

Para que nadie quede atrás 11 Esta tercera edición ampliada del libro “Para que nadie quede atrás”, coincide con el aniversario número 70 de nuestra Escuela de Perio- dismo, que en este año 2023 no solamente cumple siete décadas de existencia, sino que las celebra además con orgullo, como núcleo fundacional de la Facultad de Comunicación e Imagen de la Univer- sidad de Chile, nacida oficialmente el 14 de junio de 2022. Desde el pequeño local de la calle San Antonio donde Ramón Cor- tez Ponce dictó la primera clase de Periodismo Informativo el 20 de abril de 1953, hasta el moderno edificio del Campus Juan Gómez Millas que alberga a la facultad, han pasado miles de estudiantes y centenares de académicos y funcionarios por las aulas de clases y demás instalaciones. Y por sobre todo, ha pasado la historia. Una historia que remite a los desaf íos y tendencias de la formación de periodistas y comunicadores, en un camino que registra episodios críticos y más de alguna frustración, pero que en el balance final ha significado marchar siempre hacia adelante. Desde su primera edición el año 2014, el propósito de este libro elec- trónico ha sido el de dar rostros a esta historia, rescatando para ello Prólogo a la tercera edición las semblanzas de estudiantes y maestros que han abandonado este mundo, pero cuyas huellas permanecen entre quienes compartieron con ellos como compañeras o compañeros en la Escuela o como sus discípulos. Amedida de que este libro ha ido sumando textos e imágenes hemos visto asimismo transcurrir los años. “El tiempo, el implacable”, como diría Pablo Milanés, nos enfrentó en este último tiempo a la partida de valiosas y valiosos periodistas de nuestra Escuela e igualmente de notables profesores. Entre los maestros, reseñamos en esta nueva edición la vida y tra- yectoria de Domingo Ulloa, quien educó en el arte y la técnica de la fotograf ía a 1.200 estudiantes de la Escuela. Está también Raúl Mu- ñoz Chaut, quien cumplió un largo trayecto enseñando redacción y gramática a generaciones de la calle Los Aromos, Belgrado y Juan Gómez Millas, además de desarrollar labores de dirección en la forja del Instituto de la Comunicación e Imagen, antesala de la Facultad. Maestra fue igualmente Irene Geis, al igual que Eliana Cea. Dos mu-