Nos seguimos movilizando: la revolución será feminista o no será

132 - Nos seguimos movilizando. La revolución será feminista o no será espacios de cuestionamiento, debate y proyecciones para quien lo lea. Por- que nuestra lucha no está acabada ni resuelta, y ante la voluntad histórica de borramiento de nuestra memoria es vital sostenerla, tanto como referencia y autocrítica. Solo así garantizamos la no-repetición de aquellos errores que se cometieron en el pasado, y que seguiremos cometiendo, en tanto somos personas falibles y en permanente reflexión las involucradas en esta lucha. Así, disputamos la idea del feminismo como un movimiento homogé- neo, compuesto por la sola categoría de inclusión o exclusión: el ser mujer. Por el contrario, insistimos en su complejidad y pluralidad, donde más bien aparecen feminismos que se construyen a partir de los nudos políticos que defendemos en la amplitud y diversidad de personas que componemos y mantenemos con vida el movimiento. Habitando los puntos de acuerdos y desacuerdos que se dan en el encuentro con otres a la hora de formar, en- riquecer y defender nuestros principios. Diferencias que se hicieron parte de este mismo escrito y que permanecen como disensos dentro del mismo equipo que conformamos para llevar a cabo este proyecto. Hacemos la reflexión de que es un libro redactado por mujeres que se consideran cisgénero y enfocado mayoritariamente en la experiencia de ser mujer en las tomas y paros del 2018. Teniendo eso en consideración, hay mu- cho que se nos escapa, creemos que la experiencia trans, no binaria y/o disi- dente queda como insuficiente en el añadido «mujeres y disidencias»», en el lenguaje inclusivo y en los relatos recopilados. Insistimos en un llamado a no romantizar el proceso de movilización del 2018, reconociendo que en es- tos espacios hubo compañeres y corporalidades que no encontraron un lugar para estar; hubo presencia de lógicas patriarcales al desenvolvernos y expre- sarnos —posiblemente porque eran las únicas maneras que conocíamos—, dando cuenta que, al fin y al cabo, sin contexto y sin situación, en nombre del feminismo se pueden generar nuevas opresiones. Este libro es una incitación para no bajar la guardia, no bajar los brazos. El avance del movimiento feminista en el país y continente ha permitido que una serie de discusiones sobre el machismo y la violencia de género se insta- len dentro del debate público, siendo parte del lenguaje cultural, político, legal e institucional. Lo que nos ha llevado a redactar la primera constitución con paridad de género junto con la incorporación de distintas comunida- des históricamente marginadas en la creación de un sistema de gobierno. Sin embargo, esto no significa que las diversas violencias y discriminaciones lle-