Nos seguimos movilizando: la revolución será feminista o no será

113 tejiendo la memoria feminista Antecedentes de la movilización. ¿Cómo se llegó al Mayo Feminista del 2018? Antes de hablar de mayo debemos reconocer que no fue algo espontáneo, sino que se inserta dentro de la historicidad de todo un movimiento feminis- ta, y de una multiplicidad de esfuerzos de compañeras que entregaron espa- cio y lugar a ese grito colectivo. En ese sentido María José releva la importan- cia de esos trabajos previos: (...) nadie podía estar indiferente al proceso que se estaba gestando, que, si bien viene de mucho antes, yo creo que hay muchos procesos que un poco generan que luego quizá el Mayo Feminista pueda co- sechar ciertos aspectos, y pueda gestionar la masividad que tuvo. Es porque ya se venía gestando un trabajo de hormiga en las distintas facultades, en los distintos territorios, y era algo que no salió de la nada, sino que, por algo, por alguna razón hizo sentido, e hizo sentido en espacios que también estaban muy alejados de estos discursos, en espacios derechamente conservadores. Para hablar de mayo debemos hacer un ejercicio de reconocimiento de luchas pasadas, que dotan de sentido al movimiento que somos hoy. Para Alejandra, esa conexión con nuestra historia nos ha permitido ser conscien- tes y valorar el proceso iniciado por nuestras predecesoras, tal como señala a continuación: (...) también pudimos amplificar las demandas históricas del movi- miento feminista y pudimos trabajar hacia una conexión con las de- mandas que se venían gestando incluso desde la post dictadura. Creo