Salud mental universitaria: voces, trayectorias y prácticas situadas

SALUD MENTAL UNIVERSITARIA • 355 licados. Dicha coyuntura no hacía posible configurar espacios seguros de trabajo ni para lo individual ni para lo grupal, dado que el diálogo no se pudo sostener porque no hubo condiciones que resguarden mínimamente la configuración de espacios de confianza. En tal sentido, pese a que la primera parte de la intervención con los/as estudiantes se llevó a cabo, esta tuvo bajo o nulo impacto porque no habilitó espacios de tramitación con la contraparte. De esemodo, un análisismás profundo de la situación hizo visible que si bien este tra- bajo consistía en un apoyo que atendió una coyuntura particular en torno a la convivencia entre estudiantes y académicos/as, surgieron aspectos institucionales estructurales que definieron el modo en que concluyó esta propuesta de intervención. Así, la demanda de un trabajo en torno a la convivencia dirigida a la Unidad de Psicología fue la actualización de tensiones constitutivas de una Unidad Académica heredera de un modelo de conser- vatorio en el que las asimetrías de poder se magnifican. De acuerdo a los profesionales que analizaron la intervención propuesta, es posible señalar que la consecuencia de este escenario en el campo de la vida universitaria es el poco involucramiento del estamento docente en tanto actores/as de una comunidad, donde las dinámicas de las que son parte tienen un impacto directo en el bienestar y la salud mental estudiantil. Ahora bien, otro plano de reflexión en torno a esta intervención estuvo enfocado espe - cíficamente en torno al rol de la Unidad de Psicología en esa Unidad Académica en parti - cular. Por un lado, esta experiencia otorgó evidente relevancia al trabajo en la convivencia biestamental entre estudiantes y académicos/as. Ello sin perder de vista que en tanto profesionales de la saludmental también son parte de este entramado institucional, con unmandato explícito de resguardo por la formación integral y el bienestar del estamento estudiantil. Sumado a ello, fue posible explicitar tras esta evaluación la importancia de reflexionar y visibilizar las condiciones de posibilidad para realizar o no realizar ciertas intervenciones en consideración de aspectos estructurales, de los recursos humanos, de los soportes institucionales y de las posibilidades o limitaciones al instalar un trabajo colaborativo con otros/as. En suma, la buena práctica de la Unidad de Psicología de la Facultad de Artes fue dar cuenta de un proceso de reflexión tras una intervención fallida en torno al Apoyo en la convivencia biestamental con una carrera, que dejó aprendizajes relevantes para pensar las condiciones de posibilidad para el trabajo institucional de profesionales de la salud mental en el contexto de la educación superior.