Salud mental universitaria: voces, trayectorias y prácticas situadas

310 • SALUD MENTAL UNIVERSITARIA sidad sensible, de una Universidad sentipensante que -como dice Rosa- es unamejor Universidad? No porque seas riguroso/a, porque aplicaste el ar- tículo del reglamento, o porque seas ordenado/a, todo ello está muy bien, pero hay momentos en los que uno/a tiene que estar consientes de su rol en determinadas situaciones y sobre todo po- ner cuidado en la interacción con las personas. También me llama mucho la atención cómo a veces los estudiantes se quejan de que en algu- nas secretarías, donde van a pedir información o algo, no hay un trato deferente o preocupado hacia ellos/as. Entonces ese elemento de cómo la comunidad se involucra de verdad en esto, en este cambio y en esta diversidad es un tema central que debemos abordar. Es un trabajo que tiene que ver con la salud mental. Rosa Devés : Voy a agregar una cosa antes, no es discurso pero es algo que tiene que ver con lo que decía Leonor, es una idea nueva que me ha llegado a la cabeza a raíz de la madre de un estudiante que me dice, “hay muy poco para los estudiantes de primer año, estuve viendo en el verano qué podía hacer y vi que la Universidad no disponía de muchas opciones”. Eso me hizo pensar que en realidad los/as académicos/as tenemos como un pudor, yo diría como una dis- tancia, en el sentido de que el mundo estudiantil es el mundo estudiantil y se la van a arreglar entre ellos, uno no debe intervenir. Es su ambiente, tienen sus 180 organizaciones y nosotros lo ce- lebramos eso por supuesto, pese a que algunos estudiantes dicen que no conocen cómo llegar a ellas. Pero no interactuamos, no generamos esos espacios activamente. Está el Premio Azul, los fondos concursables Valentín Letelier, pero eso es limitado. Bueno y el deporte se da en otro ámbito. Pero es limitado y yo creo que es limitado porque uno/a tiene esta visión de estos/as estudiantes que son capaces de hacerlo todo y de relacionar- se, que tienen sus movimientos políticos, en fin. Por lo tanto, lo que nosotros/as debemos hacer es limitarnosmás bien a lo académico. Lo otro es más bien tolerar en el sentido de, quizás, incluso celebrar sus actividades, pero no intervenir. No sé, está la orquesta pero motivada por la propia institución, cómo generar esos espacios y a lo mejor los estudiantes los necesitan, necesitan estos acompañamientos. Es una cosa nueva, y bueno ella me decía “no hay nada para mi hijo”. Roberto Aceituno : Bueno yo creo que eso tam- bién tiene que ver con el tiempo. Hay cosas que existen, cosas a las que no pueden acceder por- que el tiempo es limitado. Por ejemplo, la par- ticipación en la institución deportiva de una manera relativamente sistemática requiere un tiempo de desplazamiento, de estar, de volver y eso no funciona muy bien en un sistema donde mientrasmás llenemos el día de cursos, mejor. Yo creo que eso también atenta con lo que tú dices, Rosa. Como si dejar espacios de tiempo fuera ser flojo/a, cuando en realidad son espacios de tiempo necesarios para que se llenen con otras actividades. Pamela Díaz-Romero : Cortito, porque es solo para redundar en dos temas que me parecen importantes. Primero, respecto al tema de los proyectos de vida y cómo la diversificación hace ingresar a estudiantes que no tenían prefigurada la profesión como un proyecto. Se enfrentan a esto como un universo para el que no tienen cla- ves de interpretación. Yo creo que el Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Edu- cación Superior (PACE) es de las cosas que más

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