Agresiones sexuales: reflexiones acerca de la intervenciones psicológicas. volumen VI

253 Significados personales que emergen en la persona del terapeuta frente a madres que presentan un patrón tolerante ante el... Alicia Barraza Gallo, Milton Loi, Alexandra Venegas Chicahual contempla un total de 19.193 denuncias, de ellas el 58,75% co- rresponde a 11.276 delitos sexuales cometidos por imputado conocido, mientras que las restantes 7.917 que comprenden el 41,25%, corresponden a denuncias donde los agresores son im- putados desconocidos por la víctima (Fiscalía de Chile, 2015). En torno a la relación y vínculo con el agresor, se generan dos distinciones, donde por un lado se encuentra “la agresión sexual extrafamiliar por desconocidos, la víctima no tiene un vín- culo de conocimiento o cercanía previo con el abusador” (Policía de Investigaciones [PDI], 2004, p. 66). Y también está la agresión sexual intrafamiliar, generalmente de ocurrencia en la infancia y/o adolescencia, donde “la agresión es cometida por un miem- bro de la familia, ya sea el padre, la madre, el padrastro, el tío, el abuelo, el hermano, etc. En este caso, el abusador manipula el vínculo familiar” (PDI, 2004, p. 67). A partir del conocimiento de la incidencia de los delitos se- xuales, es que surge la necesidad de generar instancias de trabajo en el aspecto reparatorio con víctimas tanto directas como indi- rectas de estos delitos. Comprendiendo que al hablar de víctimas indirectas se contemplan a “personas que también pueden verse afectadas por este delito, como por ejemplo los familiares de la víctima directa” ( PDI, 2004, p. 21). Se entiende entonces que la problemática afecta no solo al niño-niña-adolescente sino tam- bién a sus cuidadores no agresores y entorno más cercano, por lo que el trabajo en lo reparatorio no se centraría solo en la víctima sino también en sus cuidadores primarios, rol que generalmen- te cumple la madre, pieza clave, pues como refieren Sinclair y Martínez (2006), “el apoyo materno es el factor más significativo en la moderación del impacto traumático en los niños” (p. 25). Aspecto valioso, debido a que la madre resultaría ser el sustento primordial para los niños-as víctimas de agresión sexual. No obs- tante y como destacan las mismas autoras hay cierto desconoci- miento del trabajo con madres pues “se observa una importante omisión (...), un aspecto que ha comenzado a ser considerado en la literatura sólo de manera muy reciente” (Sinclair y Martínez, 2006, p. 25), lo que se confirma al señalar que “los estudios diri- gidos tanto a la comprensión como al tratamiento de las variables