Modelo de certificación universitaria en estándares de igualdad de género, sello genera igualdad.
202 dirección de igualdad de género anexo 2 . caja de herramientas formación, docencia y aprendizaje 1. PRESENTACIÓN La Universidad de Chile, como institución de educación superior de carácter estatal y público, centra su quehacer en las necesidades del país y su desarrollo, estando a la vanguardia en diversos ámbitos del conocimiento y a la vez aportando a las transfor- maciones sociales que Chile necesita. Si bien históricamente, las características del contexto van planteando a la universidad tensiones, desafíos y oportunidades; duran- te los últimos años el contexto nacional e internacional se ha vuelto especialmente crítico, apremiando por respuestas de las instituciones públicas y universitarias ante los desafíos actuales que la sociedad enfrenta, entre ellos: una mayor igualdad de género, enfrentando las desigualdades y discriminaciones dentro y fuera del espacio universitario. Las universidades estatales en Chile han manifestado su voluntad y compromiso ante la comunidad nacional y sus propias comunidades educativas, para comprender, va- lorar y promover la igualdad de género en su quehacer, enfrentando las desigualdades que se manifiestan en sus espacios y actividades para resguardar la igualdad de dere- chos, oportunidades y la no discriminación de todas las personas. Fruto de ese com- promiso, las universidades estatales se encuentran desarrollando diversos procesos de institucionalización de los principios de igualdad género y no discriminación, que en el caso de la Universidad de Chile se han traducido en diversos tipos de iniciativas. Entre ellas, destaca la definición y reconocimiento de estándares de igualdad de gé- nero (Sello Genera Igualdad) con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), cuyo propósito es “generar un proceso de transformación institucional en la Universidad de Chile para instalar una cultura de la igualdad de género en distintas áreas y niveles del quehacer universitario, a partir de la elaboración y monitoreo de un conjunto de estándares que responden a diversas dimensiones” . En dicho proceso de certificación se ha identificado como uno de los objetivos “for- talecer la institucionalidad de género universitaria”, siendo clave para enfrentar este desafío promover espacios de formación y fortalecimiento de capacidades de gestión dentro de la comunidad universitaria. Como parte de las recomendaciones que ema- nan del proceso de autodiagnóstico en esta materia destaca la necesidad de crear uni- dades de género en las Facultades, Institutos y Vicerrectorías y que los/as integrantes de los equipos ejecutores de planes y políticas de género cuenten con experiencia y conocimiento en temas de género. De ahí la relevancia de fortalecer la formación institucional como eje central para el cumplimiento de los compromisos de género. Cabe señalar que la formación en género es parte fundamental de los procesos de transversalización de la perspectiva de igualdad de género dentro de las institucio- nes públicas, incluidas las universitarias. Habitualmente es una de las principales actividades desarrolladas en respuesta a compromisos o planes institucionales, con- vocando a quienes integran las organizaciones o se relacionan con su quehacer. Si bien su desarrollo es amplio -en términos del volumen de actividades habitualmente desarrollados dentro de las instituciones públicas en Chile- no siempre dichas activi- dades están insertas en el marco de una propuesta formativa que responda al objetivo estratégico de los procesos de transversalización: impulsar el cambio institucional, con un carácter progresivo y sostenido. Por ello, es necesario transitar desde procesos de formación centrados en la sensibi- lización, de carácter esporádico o reactivo, hacia procesos de formación integrales, sistemáticos y proactivos para avanzar y profundizar el desarrollo e implementación de la transversalización de la igualdad de género en su sentido transformador para las universidades y la sociedad. Dicho propósito implica desafíos para las instituciones, dado que los procesos de formación en género son complejos, no sólo por sus temáti-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=