Seminarios de investigación en tecnología. Carrera de Arquitectura. Semestre Primavera 2022

Seminarios de investigación en tecnología – Semestre Primavera 2022 85 1. Introducción El ruido ambiental es un contaminante cotidiano presente en el día a día de las personas habitantes de las grandes urbes del mundo. De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el ruido es la segunda problemática ambiental que afecta la salud, detrás de la contaminación atmosférica (partículas en suspensión). De hecho, las consecuencias de esta contaminación pueden provocar distintos problemas de salud como trastornos del sueño, molestias graves, estrés, problemas metabólicos, problemas cardiovasculares y deterioro cognitivo en los niños (OMS, 2018). Investigaciones recientes realizadas por la Agencia Europea de Medio Ambiente afirman que: “El número total de personas expuestas a niveles de ruido día-tarde-noche de 55 dB o más se estima en 113 millones para el ruido del tráfico rodado, 22 millones por ruido ferroviario, 4 millones por aviones ruido y menos de 1 millón por ruido causado por industrias”. (European Enviromental Agency, 2021. p15) En Chile, la propagación de elevados niveles de ruido es una de las principales problemáticas ambientales que afecta la calidad de vida residencial. De acuerdo con cifras recientes del Ministerio del Medio Ambiente (MMA), el 50% de las denuncias recibidas por su Superintendencia de Medio Ambiente, corresponden al contaminante ruido (MMA, 2022). Por otra parte, cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) indican que, durante el día, el 31% de la población urbana se encuentra potencialmente expuesta a niveles de ruidos inaceptables en su vivienda, que corresponde a un valor mayor a 65 dBA OCDE, y, durante la noche, un 51,9%, que corresponde a un valor de 55 dBA OCDE (INE, 2018). La problemática de la propagación de ruido aéreo afecta al stock construido de viviendas y se puede resolver por medio de la adición de materiales absorbentes o aislantes dentro de muros y/o pisos para mitigarlo; o por medio del adosamiento de algún elemento que contribuya a solucionar el problema. De la propagación del ruido aéreo se pueden desprender dos fenómenos acústicos, estos corresponden a la aislación y la absorción acústica. La aislación consiste en limitar la transmisión del sonido entre dos ambientes. Mientras que la absorción consiste en mejorar el confort acústico y mitigar la reverberación. La propagación de sonido exterior afecta a la vivienda de tres maneras distintas: a) por medio del aire, a través de las ventanas, puertas e instalaciones; b) a través de los muros, que, en el caso de las viviendas de entramado ligero, provoca un efecto “tambor” por la vibración de los paneles y el vacío entre los tabiques; y c) a través de las juntas, considerando muros, lozas, pilares, tabiques, vigas y techos. De acuerdo con cifras del Centro de Innovación en Madera de la Universidad Católica, durante el período 2015-2019 el porcentaje de viviendas de 1 y 2 pisos construidas en sistemas constructivos en madera alcanzó el 20%, liderando la preferencia respecto a otros sistemas como la albañilería y el hormigón (UC, 2021). Este sistema generalmente no cumple por sí mismo con las exigencias acústicas para la reducción de ruidos, que según el artículo 4.1.6 de la OGUC, corresponde a 45 dB de reducción acústica por transmisión aérea y 75 dB de

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