A 50 años del inicio de la fonoaudiología en Chile: experiencias y desafíos actuales en salud pública

160 Por su parte, los avances en términos de gestión clínica (Pavez et al., 2020) han permitido que hoy en HUAP contemos con un equipo de 10 fonoaudiólogos trabajando enmodalidad diurna y cuarto turnomodificado. Esta gestión posibilita realizar atención clínica 12 horas, los siete días de la semana, permitiendo así satisfacer las diferentes necesidades de los usuarios y los equipos clínicos. Desafíos futuros Se hace imperativo revisar y actualizar la guía clínica GES n° 55 Gran Quemado (MINSAL, 2016), cuya última actualización fue el 2016, profundizando el apartado de rehabilitación e incorporando información referente a nuestra disciplina. De igual forma, se hace necesario continuar la capacitación de los profesionales de la red nacional de atención en salud respecto del abordaje de los grandes quemados, con el objetivo de dar continuidad a la rehabilitación. Asimismo, es preciso fomentar la investigación clínica, levantando experiencias y datos locales que permitan respaldar el trabajo realizado e incluirlo, así como evidencia disponible, en los programas de políticas públicas relacionados con grandes quemados. CONCLUSIONES El trabajo a lo largo de estos años no ha sido sencillo, pero ha significado un proceso bonito marcado por el aprendizaje, conocimiento, crecimiento profesional y personal, así como el trabajo duro, los que actualmente permiten mirar en retrospectiva y recoger los frutos de la siembra. Al trabajar con personas grandes quemadas son múltiples los factores que se conjugan para realizar un abordaje efectivo, sumado a los factores internos propios de cada individuo para lograr el éxito de la intervención. Más allá de lo práctico y propio de nuestra profesión, es fundamental no perder el foco de lo que somos —personas—, de esta forma no nos desensibilizaremos con la historia del otro, que se encuentra en una situación de dolor y sufrimiento y podremos enfocar nuestra energía en el éxito conjunto. La mirada no cambia, pese a que el envoltorio no se encuentre en el mejor estado.