Policy Brief: recomendaciones para la consideración del ambiente alimentario doméstico en las intervenciones alimentario-nutricionales

4. RECOMENDACIONES PARA LA POLÍTICA PÚBLICA 4.1 Se recomienda la modificación/actualización de las Guías Alimentarias Basadas en Alimentos (GABA) para Chile. Si bien los mensajes definidos en las GABA se generan desde principios científicos y deben reflejar la situación nutricio - nal del país, es imprescindible que contemplen los distintos ambientes alimentarios, en especial el doméstico, en el cual las condiciones socioeconómicas, de género, y la cultura ali- mentaria del hogar determinarían el poder seguir o no estas recomendaciones. Se sugiere entonces que las GABA, e ico- nografías asociadas, apuesten a algo más que la enumera- ción de órdenes, superando la visión dicotómica de lo bueno y lo malo”. Es necesario que las GABA reflejen las dinámicas domésticas, la comensalidad y que den cuenta de prepara- ciones más que de una simple recomendación de frecuencia de consumo de alimentos aislados (Scander et al., 2021; do Amaral et al., 2020; Vik et al., 2016). Por otra parte, es necesario que las GABA reconozcan que los sujetos principales que realizan las labores del ciclo ali- mentario son las mujeres. Para alimentarse se requiere de mucho trabajo, energía y tiempo y si la tarea está centrada en una sola persona no es posible pensar en cumplir re- comendaciones de alta exigencia de compra y preparación (Franch et al., 2021; Sen y Ostin, 2007). Identificar a dichos sujetos responsables es otorgar reconocimiento y posibili- tar ayudas directas. Se requiere, además, recomendaciones acerca de la redistribución de las tareas relacionadas a la alimentación en el interior del hogar. Considerar poblaciones homogéneas y carentes de contex- tos desde políticas públicas, tiene el problema de soslayar medidas concretas para poner fin a esas desigualdades, lo que contribuiría a mantener y naturalizar las condiciones de vida que merman el acceso a una igualdad sustantiva para las mujeres, que son en todos los reportes, quienes predo- minan en el quehacer de la alimentación y quienes peor se alimentan (Franch et al., 2021). Por último, es necesario representar a las mujeres de manera diversa mostrando una correspondencia étnica, generacio- nal, territorial y local, que atienda a distintas expectativas y motivaciones, dándole pertinencia a las GABA (PNUD, 2013). Actualmente (2022), el Ministerio de Salud está conduciendo un proceso de actualización de las GABA chilenas, pero no hay claridad de si los tópicos indicados anteriormente esta- rán presentes en esta nueva versión. 4.2 Modelo de Atención Integral en Salud. La determinación del estado nutricional de la población se basa principalmente en mediciones estandarizadas (peso, talla, índice de masa corporal, circunferencia de cintura). Si bien, se incluye la indicación de indagar sobre “información alimentaria” en las normativas, esta suele limitarse a pregun- tas generales basadas en las guías alimentarias, así como preguntas por preferencias y aversiones. En algunos casos también se incluye la indagación de patologías crónicas de la familia nuclear; en otros casos antecedentes socioeconómi- cos. Esto es insuficiente para un diagnóstico integrado. 4.2.1 Se recomienda incorporar en el diagnóstico nutricional integrado, en la consulta nutricional y en los controles de salud, la indagación del contexto, las prácticas y rutinas alimentarias del entorno doméstico. La información de contexto y prácticas, da cuenta de los es- pacios, ritmos, estructura y personas que intervienen y se despliegan en las distintas etapas del proceso alimentario (decisión, compra, preparación, servicio, limpieza, orden, desecho). Son relevantes preguntas respecto de dónde se come, en compañía de quién, quién cocina, qué se transmi- te en las cocinas e ingestas, cuándo y cuánto se come y se prepara, qué es lo que se desecha o no se compra, cómo se cocina, quiénes toman decisiones y por qué y quién reali- za las tareas vinculadas a la alimentación. Explorar cómo las personas viven y las dinámicas familiares que influyen en su ambiente doméstico, permite identificar barreras y potencia - lidades para mantener una alimentación saludable, más allá de las indicaciones de cumplimiento de recomendaciones y guías alimentarias. El objetivo es identificar por qué no pue - den llevar a cabo los cambios que necesitan, aun manejando la información. Se debe focalizar la conversación de manera que aparezca, sin agobio, el potencial y la agencia de las propias personas a posibilitar sus cambios y metas. Estos cambios pueden ser realizados a través de la incorporación de la entrevista motivacional como herramienta comunica- cional diagnóstica para adaptar las guías alimentarias a la situación individual y contextual de las personas. Esta reco- 8 UN I V E R S I DAD DE CH I L E Vicerrectoría de Inves tigación yDesarrollo INVESTIGACIÓN INNOVACIÓN CREACIÓN ARTÍSTICA POLICY BRIEF

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