Repensar la investigación literaria en tiempos de crisis

Repensar la investigación literaria en tiempos de crisis 29 Encrucijada Era todo mentira. Cordillera que de grande te haces trizas y pedazos. Detrás de mis plumas se esconden los sablazos. Pájaro que creyó vivir sin ira. Qué triste, sin duda, no saber dónde volar. El mundo, tal y como apareció, es la más pequeña puntada del telar. Nadie sabrá dirigir aquellas manos que han de hundir al barco sin mar. «¡Estoy perdido!», dijo el pájaro en el viento. Su voz no llegará hasta el altiplano. Los sueños serán vacío que jamás podré tener entre los brazos. En el último tejido de las playas. ¿Nos dirás adónde acaban las venas, y empiezan las risas de las almas? Ni el poeta con su lira, o el viejo con su martillo, ni la niña con sus ojos saben del grillo, del ritmo que clava en las cabezas las penas que dan vida. ¡Cordillera! Ya estás hecha pedazos, qué tristeza. Acábame la existencia, que no sé dónde aletear. Que las montañas algún día, sean el aspecto de mi viaje. Como en la mitad de Santiago, Baquedano, una encrucijada, telas de arañas. Me voy llenando de restos, de lágrimas, de hierros, por no saber dónde tejer, el último camino de mi lienzo.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=