La vejez en contexto de transformaciones globales: desafíos éticos transdisciplinarios
Además de la pandemia existen las comorbilidades, factores que generan mayor riesgo de enfermar grave o morir por COVID-19, se habla mucho de la hipertensión, obesidad o de la edad, nosotros planteamos que la principal comorbilidad es la pobreza. Una per- sona mayor que se encuentra en condiciones de riqueza, en una buena casa con todas las comodidades; con agua potable, con ser- vicios de salud a su alcance, con gente que puede llevarle de comer, que le pueden hacer trámites y que tiene una red de apoyo, no vive tanto riesgo como una persona más joven o de la misma edad, pero que vive en un barrio comunitario, hacinado, sin agua potable, sin redes de salud y sin redes familiares. Por lo tanto, la principal comorbilidad, no solamente en el CO- VID-19, sino que de cualquier enfermedad, es la pobreza. Vemos que la pandemia sirvió para plantearnos la injusticia que hay en el mundo, sobre todo que nosotros, vivimos en la región más in- equitativa del mundo, hay 26 personas que tienen la mitad de las riquezas mundiales. Mientras tengamos un mundo tan injusto, es muy difícil no solamente combatir la pandemia sino que también la pobreza, las inequidades sociales, inclusive las desigualdades de género. Nuestra región, que si bien no es la más pobre del mundo, es la más desigual e indudablemente tiene un alto índice de pobreza; el 30% de la población en América Latina es pobre y se calcula que esa pobreza aumentó en el 2020 al 37%. La pandemia ha generado que más personas caigan en esta situación de pobreza, dentro de esa pobreza lo que observamos es que el 30% de esas personas son personas mayores, cifra que en algunos países llega al 50%. Otro factor que agravó la pandemia es la insuficiencia del sis- tema de salud, ya lo plantea la OMS, que se necesita una inversión del 6% del PBI, el promedio del gasto del sector público en salud en América Latina es del 3,7%. Países como Argentina o Chile se acercan un poco más, pero no llegamos al 6%, de igual manera este es un dato de la OPS del año 2019, ya sabemos que los sistemas de salud en el 2020 y en el 2021 han aumentado las inversiones. Otra gran inequidad es la falta y escasez de personal sanitario, según el mismo estudio de la OPS, América Latina tiene un promedio de médicos/as de 21,4, de enfermeros/as de 15,8 pero hay países como Uruguay que tienen casi 50 médicos/as, casi 20 enfermeras/os, o OCTAVA ESCUELA INTERNACIONAL DE VERANO SOBRE ENVEJECIMIENTO
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=