80 años de un viaje: Teatro Nacional Chileno 1941-2021

80 AÑOS DE UN VIAJE Teatro Nacional Chileno 1941- 2021 Daniela Cápona Al intentar periodizar la historia del Teatro Experimental de la Universidad de Chile surge una analogía casi espontánea y seguramente demasiado simple, la de la vida humana. Se suele hablar del periodo entre 1954 y 1973 como una época de esplendor, y al revisarla de cerca resulta orgánico pensar en esos años como unos de crecimiento que desembocan en la madurez. Como si los años de impulso y formación inicial rindieran frutos y comenzara entonces a configurarse una personalidad más compleja, como si esta entidad ya formada comenzara a hacerse un lugar en la comunidad. Se trata de una época de afianzamiento y consagración, la compañía construye su lugar en el proyecto de país que se encuentra en curso, configura redes, perfila un camino y asume posturas críticas sobre la realidad. Todo lo anterior se observa al revisar las actividades de la compañía, la organización de la misma y por supuesto la programación que cada año se pone en escena. La fundación del Teatro Experimental suele ser referida como el hito que señala el inicio de la modernización del teatro chileno. Las razones son conocidas, especialmente en lo que refiere a lo teatral: se modifica la metodología de trabajo, cambia además el repertorio e incluso la organización laboral, que acaba por eliminar la figura del divo/primer actor/ empresario. Sin embargo, a menudo se pasa por alto un factor que resulta crucial en la transformación del teatro local, y es que el Teatro Experimental de la Universidad de Chile genera un vínculo inédito entre teatro y el Estado, vínculo que se establece, como es de suponer, a través de la universidad como institución que conecta la actividad artística con el proceso de desarrollo nacional. Esta relación, que en un comienzo parece hasta casual, se vuelve rápidamente relevante en tanto posibilita el crecimiento y estabilidad de la com- pañía, la que puede paulatinamente desentenderse de ciertos aspectos burocráticos o eco- nómicos centrándose en la producción y experimentación artística. El teatro Experimental se encuentra, gracias a su inclusión en el proyecto universitario, en posición de utilizar la estructura que este provee para generar un alcance mayor en cuanto a difusión y extensión a nivel nacional. Una cuestión igualmente importante es que dicho vínculo va fortaleciéndose a medida que la compañía crece y se instala como pieza central de la actividad cultural nacional. El fortalecimiento de dicho vínculo, eventualmente significará la inclusión del Teatro Experi - mental, que en 1958 pasa a llamarse Instituto del teatro de la Universidad de Chile, en parte de un proyecto de país, encabezado por el Estado. DE LA JUVENTUD A LA MADUREZ (1954-1973) 93

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