Innovar y transformar desde las disciplinas: experiencias claves en la educación superior en América Latina y el Caribe 2021-2022
3 A partir de estas tres dimensiones, es oportuno plantear algunas reflexiones de prác- tica académica con la finalidad de problematizar en lo que se ha mencionado como el dinámico escenario de la docencia en educación. En este sentido, la pregunta que per- mitirá seguir con la discusión es: ¿cuáles son las reflexiones desde el liderazgo organi- zacional, la virtualización de las competencias docentes y la evaluación para los apren- dizajes que afectan a la docencia en educación superior? 2 Desarrollo La nueva educación abre procesos intersubjetivos, múltiples, indeterminados, de carác- ter situacional e inasible como totalidad, manifiestan una tensión permanente con las tecnologías implicadas en el acto de enseñar y demandan asumir la distancia como una continuidad inevitable y transitar en la experiencia desde una episteme abierta a la con- tingencia y a la multirreferencialidad, que se aleja de la ficción del control y asume la distancia, como una condición generativa de lo que llamamos una “observación ajus- tada” y situada de la acción, donde abren espacios de extrañamiento de aquello que ha sido familiar y permite asumir críticamente la realidad definiendo permanentemente, como hablar de ella desde la razón, emoción y una apreciación moral (Ginzburg, 2000, p. 28). El gran desafío, tanto de la docencia a nivel escolar como la superior, es preparar a los estudiantes para un futuro que ni él, ni el docente, ni nadie conoce, ¿Cómo desen- trañar esta problemática? Pues asumiendo los cambios, en primer lugar, y aceptar, in- mediatamente después, la reinvención como parte intrínseca del proceso de enseñanza- aprendizaje. La educación está en permanente cambio, en permanente transición. La pandemia ha obligado y ha marcado fuertemente los cambios que se debieron haber asumido en la medida que la tecnología avanzaba. Antes, se podía prescindir más o menos de ella, después de la pandemia, en cambio, se hizo necesaria su utilización en favor del aprendizaje. Se transformó en una condición sine qua non para enfrentar este nuevo e incierto panorama, del que no se puede escapar ni mucho menos ignorar. Si se considera la educación como en un continuo proceso de cambio, indudable- mente, siempre se estará hablando de la nueva educación, tal como lo señala la cita de Ginzburg (2000). Y cada estadio, cada paradigma educativo estará abriendo nuevas esferas de acción que tensionan el campo educativo que no solo ahora ha estado en crisis. En realidad, la educación ha estado permanentemente en crisis. La pandemia puso poner en evidencia e hizo explícito lo que ya no funcionaba o lo problemático, que ya venían arrastrando las temáticas educativas en su conjunto. La crisis se hizo más profunda y la herida más abierta cuando fue necesario aislarse físicamente. 897
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=