Innovar y transformar desde las disciplinas: experiencias claves en la educación superior en América Latina y el Caribe 2021-2022

2 contenido con tareas o actividades que proporcionan un divertimento, dejando en un segundo plano el poder transformador que tiene la relación interpersonal alumno- docente al desplegar las potencialidades de uno y el enriquecimiento personal y profe- sional del otro. Esta relación se construye día a día con el encuentro espontáneo, con las conversaciones casuales y con la posibilidad de encontrarse frente a frente, pu- diendo experimentar la afectividad mutua. La virtualidad hace perder la tridimensio- nalidad, la posibilidad de calibrar emociones y la conversación espontánea (Palés- Argullós & Gasull-Casanova, 2021). 2.6 Lo irremplazable Estas reflexiones nos encuentran transitando la pandemia y viviendo la incertidumbre del mañana. Seguimos añorando lo que fue y no logramos reconciliarnos con el hoy. Deberíamos darnos tiempo para hacer el duelo por lo perdido y tomar consciencia de que no existe una nueva normalidad, intentar visualizar qué rescataremos de esta si- tuación de emergencia para planificar el futuro de la facultad, sin resignar aquellas cuestiones que se consideran esenciales (no negociables), tal como la práctica con pacientes en entornos clínicos, la interacción personal entre los estudiantes y de cada uno de ellos con los docentes, así como de los docentes entre sí. Si bien existen importantes diferencias entre la enseñanza presencial y en línea, no son fundamentalmente diferentes con respecto a los criterios de una educación de buena calidad. En cada escenario, los docentes deben compatibilizar los objetivos de aprendizaje con las características de sus alumnos y utilizarlas como base para el di- seño de tareas y entornos que promuevan el aprendizaje (Fawns, 2020). Una educa- ción de calidad en línea supone asegurar, en primer lugar, docentes preparados en los fundamentos de la enseñanza y formación online lo que va más allá del dominio de una caja de herramientas tecnológicas (Ashwin, 2020). Por ahora, se ha decidido priorizar la presencialidad en la medida en que la situa- ción epidemiológica lo permita sin negar la oportunidad que representa mantener la virtualidad, como complemento eficaz. Esta mirada tiene como consecuencia promo- ver la flexibilidad en la planificación curricular. La persistencia de la pandemia y su duración incierta requiere, por parte de las universidades, respuestas inmediatas me- diante el diseño de programas educativos flexibles (Hauer, 2021). 3 Conclusiones La pandemia irrumpió en las escuelas de medicina rompiendo cierta inercia institu- cional, generando una serie de transformaciones, en la cultura institucional, en los docentes, alumnos y administrativos y en las prácticas educativas, que en condiciones normales no hubiesen ocurrido o hubieran demandado más tiempo. Fue necesario aprender a navegar en esta nueva realidad aún sin estar listos ni convencidos de la necesidad de los cambios y aprender a superar barreras, como, enseñar habilidades de comunicación y el examen clínico por Zoom, que eran considerados imposibles para la enseñanza en ciencias de la salud. 194

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