La convivencia escolar desde el discurso de sus actores

ingredientes). Sirven los completos, los han trasladado en carros, alguien sirve bebidas en vasos. Ya sentadas corean canciones populares: dos de mi mesa se emocionan y lloran. Otras canciones se referen a la vida de interna “que es un inferno”, “las internas que salen calentitas”. Ríen, las que lloraban, ahora se toman de la mano. Ahora sigue una rutina de imitaciones. Las actrices se paran sobre la mesa central: A imita a la profesora de Inglés: Mueve su pelo, peina un jopo inexistente y mira con cierta histeria a la audiencia. La audiencia corea “¿y los puntos?. Ella responde “aquí se hace lo que yo digo” (gestos siúticos para imitar a la inspectora del internado). P imita a la profesora que está presente, de pelo cano y trato afable. La imitación destaca por el tono bajo y dulce de la voz. La joven dice: “niñas, yo siempre las llevaré en mi corazón”, remarca el ‘siempre’ y alisa el chaleco que lleva. N es conminada a imitarme, no lo hace (y yo internamente lo agradezco). Grito del Internado (con voz femenina y masculina), le siguen risas. Corean ¡SIMOLE! M me dice ¡no entiende nada! Asiento. Señala que se trata de “eso de las madrinas y las ahijadas, de las cartitas”. La adaptación que corearon se refere al “enamoramiento” y al destape del lesbianismo dentro del internado, mediante una ceremonia matrimonial incluida. El coro repite una y otra vez el nombre de la precursora, existe cierta coincidencia de sonidos: “Running through my head, running through my head” con K. S. S sube a la mesa, baila y canta el Rap Biológico: “el proceso celular, la anafase y la telofase, una médula que baila…la célula” 196

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