Los cazadores-recolectores y las plantas en Patagonia: perspectivas desde el sitio cueva Baño Nuevo 1, Aisén

Manejo de los recursos vegetales en baño nuevo 1 – 187 el uso de ciertas plantas; más bien se observó el uso de un conjunto diverso de piezas líticas, tanto formatizadas como no formatizadas, con filos activos aptos. Esto se puede entender dado que los artefactos líticos pueden ser versátiles en re- lación a la materia trabajada, aunque podrían diferenciarse en los gestos emplea- dos en su tratamiento (cortar, raer, raspar, machacar) según las distintas etapas de las cadenas de procesamiento vegetal. Esto va acompañado de la diversidad de usos que pueden tener las plantas en sus distintas partes, por lo cual el abanico de herramientas asociadas a su obtención y procesamiento puede ser amplio y adecuado a eso. Por otra parte, las fuentes documentales proporcionan indicios muy vagos sobre las técnicas y artefactos que fueron usados en el aprovisionamiento y uso de las plantas útiles nativas. Las escasas menciones registradas se refieren a arte- factos históricos elaborados en metal (Gunckel 1959; Tongol 1976). Se propuso que los múltiples usos y, consecuentemente, procesamientos de los recursos vegetales, podían implicar el empleo de un determinado conjun- to artefactual, y por lo tanto, la existencia de una especificidad funcional de instrumentos para tales fines en el sitio. Sin embargo, no se logró delimitar un conjunto definido de artefactos asociados al uso de ciertas plantas. Más bien, se observó que se usó una gama amplia de artefactos líticos en el trabajo vegetal y que distintos artefactos sirvieron para la manipulación de los mismos taxones. Esta situación estaría ligada a la versatilidad de los artefactos líticos, posiblemen- te a usos de distintas piezas con gestos particulares en distintos momentos de la cadena de procesamiento vegetal y a la versatilidad en la utilización de las plantas o de alguna de sus partes. Lograr delimitar un conjunto de artefactos asociado al uso de plantas sig- nifica ampliar el análisis a un número mayor de piezas, además de buscar otras líneas de evidencia. Por ejemplo, los análisis de huellas de uso de los materiales líticos aportan significativamente a esta discusión al establecer algunos de los gestos y sustancias trabajadas especialmente en las últimas etapas de la historia de vida de las piezas (Bellelli et al. 1987; Kealhofer et al. 1999; Álvarez 2004; Ba- bot et al . 2013). En resumen, los artefactos con residuos vegetales se asocian a las acciones de cortar, raspar y raer y machacar, lo que se vincula tanto con las etapas de obtención de las plantas (colecta) como con su posterior procesamiento y consumo (post-colecta).

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=