Iguales pero diferentes: trayectorias históricas prehispánicas en el Cono Sur

30 – iguales pero diferentes Figura 2. Proporción de fragmentos cerámicos decorados y niveles de confianza para las comunidades locales de Isla Mocha. La línea horizontal corresponde al promedio de las comunidades El material lítico, correspondiente a 3455 instrumentos y desechos, muestra un extendido uso de materias primas locales (basalto, arenisca, granito, cuarzo, otras rocas no identificadas), este alcanza un promedio del 98% de las materias primas líticas presentes por comunidad (Tabla 5). Estas fueron utilizadas en su mayoría para manufacturar instrumentos escasamente formatizados y multi-fun- cionales. Por su parte, las materias primas líticas foráneas (sílices y obsidianas), están presentes en las siete comunidades. Sin embargo esto se da con proporcio- nes disímiles que estriban entre el 0,6% y 6,0%, (comunidades P12-1 y P23-2, res- pectivamente), estando el promedio isleño en 2,2% (Figura 3). A su vez, dentro de las comunidades que presentan una mayor proporción de materias primas foráneas la representación de éstas también difiere. De este modo es que P23-2 presenta una mayor proporción de sílices, en cambio P29-1 lo es de obsidianas, y en P5-1 está más bien equiparado. Esta situación nos hablaría de que estas tres co- munidades tendrían un acceso privilegiado a estas materias primas, y por tanto, a redes de intercambio con comunidades continentales. En este sentido, P23-2 es la única que difiere positivamente del promedio de los sitios de la isla con más de un 99% de confianza, siendo también la que presenta la mayor proporción de materias primas foráneas por m 3 excavado. En el caso de las obsidianas, estas provienen de las fuentes de Nevados de Sollipulli (Chile) y de Portada Covunco (Argentina) (Campbell et al. 2017).

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