Alberto Minoletti: el vuelo de un grande

74 Alberto Minoletti | El vuelo de un grande Alberto no estuvo solo en la defensa de los derechos humanos de las personas con enfermedad y discapacidad mental, los testimonios entregados dan cuenta de su condición de profesional y ciudadano comprometido no individualmente sino siempre formando parte de un colectivo de trabajo, desde el cual emprendió la tarea transformativa de las políticas públicas, las estrategias de intervención, el desarrollo de los programas, la producción de profesionales, técnicos y administrativos capacitados en los pilares de la reforma psiquiátrica y la perspectiva comunitaria en salud mental. Esta perspectiva de colectivo social es la que estuvo también a la base de sus estrategias orientadas a la producción de ciudadanía, protección de los derechos sociales, potenciación de los movimientos sociales emergentes desde las agrupaciones de base, etc. Nuestros entrevistado/as dan cuenta de algunas de estas líneas de acción en las que Alberto tuvo un gran protagonismo, al mismo tiempo que valoran las dificultades que debió encarar desde su rol como autoridad ministerial, siempre con transparencia, respeto y valentía, frente a sus autoridades superiores. Mucho de lo que no se logró se debió a los conflictos de intereses y de poder que subyacen a las limitaciones propias de una salud pública en crisis como la chilena; aunque buena parte de esto inconcluso sigue con vida, instalado como metas de futuro inmediato para las nuevas generaciones de luchadores por una salud mental basada en principios democráticos, de justicia social, respeto y protección de la vida. Egenaunos trae a la vista los esfuerzos deAlberto por construirmovimiento social en torno a la reforma psiquiátrica, redes intersectoriales ymetas de comunitarización de las estrategias de salud mental. Leonor da cuenta del importante rol jugado en la apertura ministerial a la producción de dispositivos normativos y de monitoreo del respeto a los derechos de las personas con discapacidad mental, y también en la incidencia de los actores sociales en la producción de una legalidad que garantice estabilidad y viabilidad a los procesos transformativos, que resuelva el vacío que produjo por largos años la ausencia de una ley de salud mental para Chile. Carlos nos argumenta desde la ética y la estética de la vida humana la importancia de la superación de la categoría estigmatizante de enfermo mental por la de persona humana, sujeto de derechos gracias a lo cual los discursos de la diversidad pueden ser un gran aporte a la producción de subjetividad social. Capítulo III - Salud Mental, Derechos Humanos y Ciudadanía