Alberto Minoletti: el vuelo de un grande
108 Alberto Minoletti | El vuelo de un grande En los diversos relatos de quienes conforman la comunidad universitaria se dibuja un académico riguroso, productivo, transformador, responsable hasta el cansancio y por sobre todo profundamente respetuoso de las personas, los saberes y el colectivo. Alberto asumió la actividad universitaria con el mismo rigor con el que emprendió todos los proyectos en su vida. Verónica nos muestra el compromiso de Alberto con su Universidad, con sus procesos y exigencias, pues comprendía que los proyectos de formación e investigación no son proyectos unipersonales. Evitó siempre que su posición en la universidad por si sola le brindara créditos, aunque tenía trayectoria de sobra, nunca hizo halagos al respecto, muy por el contrario, su disposición se centró siempre en sus posibilidades de seguir contribuyendo a las transformaciones anheladas en salud mental, esta vez desde el mundo académico. Sara por su parte, da cuentade la sencillez y respeto deMinoletti frente a los diversos saberes, de la importanciade lagenerosidaddelmaestro con suestudiante, abriendo las posibilidades de crecimiento y desarrollo de estos últimos genuinamente, en la dimensión científica, humana y valórica. Una práctica de formación integral entregando a los futuros profesionales la posta para continuar un trabajo de transformación de la realidad, pues ha logrado transmitir la convicción de que un mundo mejor es posible gracias precisamente a esos estudiantes. Se trata de un maestro que también es aprendiz, como describe Zvi, que legitima la experiencia de quienes esperan aprender de él y esa actitud en si misma termina siendo una lección de vida. Un maestro interesado en sus estudiantes, comprometido con cada uno de ellos y ellas, un profe con virtudes y defectos, sin necesidad de disfrazarlos. Un maestro muy exigente, pues no puede ser de otro modo cuando hay tanta confianza en las capacidades de sus estudiantes. Carlos nos deja ver al académico inquieto, muy productivo y construyendo en equipo. Al académico con convicciones, lejos de la ingenuidad de creer que el conocimiento científico es neutro, que mira desde las prácticas en la realidad, que debate las ideas y trata con respeto las diferencias. Y deja entrever la tarea pendiente que deja Alberto a su equipo, la deuda de acercar sistemáticamente el mundo académico a las Capítulo IV - Maestro y Aprendiz de la Universidad de Chile
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=