Arqueología de la región atacameña

ARQUEOLOGÍA DE LA REGlÓN ATACAMEÑA 359 entera exactitud la cara lisa y casi pulimentada de un gran pei'iasco de traquita, todo cubierto de inscripciones.• (1) La fotografía a que hace referencia ha sido reproducida varias veces, porque es típica de muchos petroglifos de la re- gión atacameña. Bowman reproduce en las figuras 84 y 85 de su obra (2) petroglifos de la Peña en el camino entre Calama y San Pedro de Atacama. En uno de ellos se ven figuras de llamas, dibu- jadas en el estilo peruano, pero el rasgo principal es una figura grande que representa un cuero de chinchilla estirado como para secarse. El otro, más borr.oso, parece que no con tiene más que hi leras de figura geométricas, cuyas formas no siem- pre son claras. Darapsky (3) menciona y reproduce un petroglHo bastante interesante en la falda del Cerro de los Infieles . Este petro- glifo tiene figuras distintas de las de cualquier otro (véase Fig. 152). Son humanas, pintadas de frente, vestidas de ca- miseta cón coronas de pluma.; pn las cahezas. Las manos están indicadas con tres dedos. Tres de las figuras llevan la mano derecha levantada. Otras dos llevan en la mano iz- quierda lo que parece ser una boleac!ora o libe. En la parte superior, a la derecha, se halla un personaje esquemático a lado de un objeto de forma curiosa que no alcanzamos a inter- pretar. Tanto esta figura como la de otros dos personajes están inconclusas. En las demás las camisas están decoradas con hileras de pun titos. Este petroglifo, según .Darapsky está grabado con líneas que tienen un pie de ancho, de manero que deben ser de gran tamaño. Uno de los grupos más grandes de petroglifos de la región diaguita chilena es la de Chalinga, descrito por Roberto Ren- sifo. Reproducciones de tamaño nautral de cuarenta de es- estas piedras existen en el Museo Nacional de Chile, calcadas por el mismo señor Rengifo. Dice Rengifo: «Estos petroglifos son todos esculpidos en las rocas v rellenados de cemento blan co.» Dudam~s del alcance de esta última obsen·ación. Lo que probablemen te ha pasado es que después de esculpids las figuras, se han pintado de blanco, como hemos visto en otros lugares de la provincia de Coquimbo. Es posible que en algu- nas partes de los dibujos, la e.'\cavación ha sido poca profunda y la pintura, hecha a base de tierras 'blancas, muy espesa, de (1) Desierto,. Cordillero de A/4Ulmo. Ob. cit. p. 274. (2) Deser//roils oi Atacoma. por lsaiah BOWloJAN. Ne", York. 1924. (3) Das Departe",...t Tal/al (Chile). por L. Dar¡¡psl<y. Berlin. 1900,