Arqueología de la región atacameña

334 RICARDO E . LATCHAM círculo con un extremo recto y a largado. La pun ta más corta es aguzada, pero no t iene barba. E n el brazo más largo se fij a la li enza. Dos de los ejemplares de los que ex isten en el Museo tienen sus li enzas originales y una de ell os lleva un a pesa de piedra también fij a en la li enza. Midiendo el arco formado por los dos brazos, fluctúa ent re 8 y 70 mm., y el la rgo del brazo mayor , medido desde la ba~e de la curva desde 15 hasta 130 mm ., con un espesor propor- ciona l. Hay olro lipa de anzuelo en que el asta sufre una cur va hacia adent ro antes de enderezarse. PUN7.0~ES Se encuent ran a menudo, en todas partes de la región , pun- zones de cobre o de bronce . E n forma son todos parecidos aunque varían en cuanto a dimensiones. Son cilíndricos, con pun ta de un ext remo y romos en el ot ro. A veces demuestran seña les de haber sido golpeados y tienen el extremo superior algo achatado por el uso, pero parece q ue la mayor parle se ha usado con la mano para perforar sin golpear. V ARILLAS Pa recidos a los p unzones son un as varill as de cobre rectan- gul a res, con pun ta en ambos extremos . Los cin co ejempla res que existen en el Mu seo Nacional de Chil e están todas lige- ramen te arqueadas. i\ l iden de 10 a 20 cm. de largo y de S a 10 mm . de di ámetro. Las puntas son muy agudas y a larga- das, pero en a lgun os casos aboll adas por el uso. No sabemos para que pueden ha ber servido. T odas las ci nco prov ienen de Caldera. Ambrosett i, en su Bronce en la Regi6n Calrllaqní supone que eran punzones. Dice: «El Museo Naciona l (de Buenos Aires) posee varios ejemplares: unos son punzones hechos con peda- zos de varillas que deben haber tenido otro dest ino, y otros fa bricados o fund idos expresamente . «En t re estos últ imos hay varios de 42 mm. de largo por 4 mm. de ancho que semejan pequeños cl avos chatos, con pun ta aguda . Otros son de sección cuadrada de 4 mm. por lado y afi lados en sus dos extremos .> Más tarde, cuando hall ó otros ejemplares en La Paya, cam- bió de opinión y dij o que . era necesario dar otra interpreta- ción a l uso que se les ha a tribuído. > H all ó dos de mayores