Arqueología de la región atacameña

ARQUEOLOGÍA bE LA REGI6N ATAcAlfEÑA 323 Los cencerros atacameños son algo distintos de los argen- tinos, en que, en vez de ser ovalados o elípticos, son redon- dos en su corte horizontal. Todos los seis mencionados tienen esta forma y sus mediciones establecen que la altura es casi idéntica con el diámetro de la boca. La altura de los seis cita- dos es: 3, 4,5,6,5,6,8 Y 7 cm. respectivamente, y por lo tanto son más pequeños que la mayoría de los argentinos. La parte superior es más angosta que la boca, lo que les da una forma de cono truncado, con la parte superior plana. Tres de ellos tienen una decoración exterior en forma de faja, cerca de la boca, otros dos son lisos y, el últ imo, de Taltal, está decorada de un a manera distinta. La faja decorada en los tres primeros, consiste de una serie de rombos formados por dos líneas en zig - zag en sentido in- verso que se cortan, encerrados en tre líneas paralelas. En el centro de cada rombo así formado hay otro más pequeño. Fig. 145 - 1 a 3. E l cencerro de Taital t iene tres perforaciones circulares en cada lado, de unos 6 mm. de diámetro. Las superiores están en el borde mismo de la parte plana y sirven para la suspensión. Cerca del borde inferior hay una faja decorada con dibujos ,as i borrados iguales a los de los ejemplares anteriores. Fig. 146. - 5. Aunque cuatro de estos cencerros se hallaron en territorio atacameño, no cabe duda de que su fabricación haya sido dia- guita y su hallazgo fuera de la zona de su origen se debería probablemente a l comercio ele intercambio. CA)[PA:-IILI.A· Más numerosas en el tprritorio atacameño que los cence- rros, son las campanillas y a la vez son más repartidas. Son pequeñas y generalmente tienen la forma de un embudo inver- tido. Raras veces tienen más ele 6 ó 7 cm. ele largo, genel'al- mente menos y la anchura en la boca casi nunca pasa ele 4 cm. Fig. 145 - 4 y 5. Procedente de la región atacameña, conocemos vpinte; h"lla- das cinco en Antofagasta. elos en Paposo, una en Taltal, una e.n Obispito, un a en Ch iu - Chiu, dos en San Pedro de Atacama, tres en Toconao y cinco en Calelera. Tres de las últimas están en el Fielel j\[ useum de Chicago y las otras dos en el 1\1 useo NacÍQnal ele Santiago. Las cin,o ele Antofal!;asta se hallan en el i\Iuseo ele Kiel, el ele Obispito estaba en la colec- ción del Dr. Holz y las demás pn la de don Armanelo Rivera de Copiapó. inguno ele los autores que han escrito sobre la arqueolo-

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=