Arqueología de la región atacameña

316 RICARDO E. LATCHAM son atribuídas a Tiahuanaco, llevan un adorno de líneas cru- zadas, motivo desconocido en el centro del altiplano, pero común en el arte chincha - diaguita. [gual cosa se puede de- cir respecto de las túni cas o camisas llevadas por todas estas figuras, inclusas las de Loma Rica. Son idénticas en forma y estilo de decoraci6n a las pre~entadas por Ambrosetti en las Figs. 88, 89, 92, 95, 100 Y 101 de Arqueología Calc/¡aqu.í, como lo son también los adornos o diademas que Il.evan en la cabeza. Los discos de bronce con cara humana encontrados por Am- brosetti en sus exploraciones de >Pampa Grande ' y reprodu- cidos por llhle y Levillier como pruebas de las inlluencias de Tiahuanaco en la región diaguita, tampoco tienen el valor que estos autores los asignan, porque siendo de bronce, no pueden pertenecer a aquella época. Por otra parte, encontramos peinados o adornos de cabeza bipartitos del mismo estilo en algunas piezas d alfarería de Andahuala y otras partes del valle de Santa María, como también en diversos discos y cam- panillas de bronce, para los cuales nadie reclama mayor an ti- güedad. Precisa recordarse que algunos motivos artísticos no mue- ren con la época que les di6 nacimien to, sino que persi~ten con pequeñas modificaciones en lfts fases posteriores de las cultu- ras que los habían aS,imilado. Prueba de ello es la recurren- cia de las formas escaleradas de Tiahuanaco y de la región atacameña, diferentes entre sí, pero que perduraron ambos en nuevas combinaciones, en el arte chincha - atacameña y en este nuevo estilo fueron introducidas en las regiones dia- guitas. Resumiendo esta cuestión se puede decir que las cuatro placas mencionadas son típicamente diaguitas y que perte- necen a la época de las influencias chinchas: porque 1.0 El bronce no se conoció antes de esa época; 2. 0 Dos de las cuatro se hallaron en plena regi6n diaguita; 3. 0 Toda la decoraci6n demuestra estas influencias, y 4. o Semejante estilo no se ha encontrado fuera de la regi6n diaguita - argentina. Por con- siguiente la suposición de que dos de estas cuatro placas hayan procedido de Tiahuanaco y por esa raz6n se atribuyen a la cultura de esa metr6poli es errónea y a todas luces inverosímil. 5. o Por parecidas razones los discos de bronce cilados por Ohle y Levillier como muestras del arte de Tial1uanaco tampocO pueden pertenecer a 1ft época supuesta. A la lista de los países donde se han encontrado bronces prehispánicos, debemos agregar Chile, pues útiles de esta al,ea-