Arqueología de la región atacameña

232 RICARDO E. LATCHAM mas son las piezas de mayores dimensiones y es por eso que Uh le los llama jarros grandes. Por mucho t iempo se consi- deraba que este tipo se derivaba de los aribalos incaicos, pero ahora se sabe que eran comunes desde el período epigonal de Tiahuanaco. Eran especia lmente numerosos en la alfarería de la época chi ncha - atacameña, pero en el período de que hablamos tampoco eran escasos. La mayoría de los dihujos en esta clase de cerámica son pin tados en negro sobre el fondo blanco del en lucido que encu- bre los vasos. Ocasionalmen te las figuras negras son al ter- nadas con otras rojas, pero esta combin ación de tres colores es excepcional en esta época. Se encuen tran también, a veces, dibujos nef- ros sobre fondo rojo, especialmente en el sur del Perú, en el vall e del Loa central y también en Talta!. Estos dibujos parecen derivarse .de los más antiguos que Uh le creyó ser de la época epigona l de Tiahuanaco. En cuarrt o a lo:; motivo. de la decoración, los triángulos y las figuras escalonadas son los )nás típicos y casi no faltan en ninguna pieza de las pintadas, genera lmente combinados los UIlOS con los otros. Los triángu los forman. el decorado del cuello o borde de casi todos los vasos. Cuando hay una sola hilera, se colocan invariablemente con el vértice haciJ. abajo, pero cuando el goll ete o cuell o se aoorna en su borde y en su base, como sucede a menudo, van por hileras opuestas con las puntas hacia el centro de la faja. Por otra parte, las lla- madas figuras escalonadas no son otra cosa que hileras de triángulos rectangulares colocados UIlO en pos ele otro, el ángulo agudo de lino contra el ángu lo recto de! otro. Por lo gene- ral, los dibujos se colocan en campos verticales, pero no siem- pre. A veces los campos son horizontales. (A. I. C. Figs. 67 a 6C). 72, 73 y 7S,) si n que poi' ésto se cambien los motivos. Lo que llama verdaderamente la atención es el reducido número de elementos de que dispone e&te esti lo de decoración. Con la excepción de tres o cuatro sobrevivencias del período r1e Tiahuanaco o la subsiguiente epigonal, como los ganchos, rombos, rectángulos y círculos, repeticiones de la misma figura geométrica encerradas una en otras, casi los únicos motivos empleados son líneas paralelas o escaleradas, triángulos en diferentes combinaciones e hileras de puntos entre dos líneas verticales. Un examen de las figuras 62 a 83 de La AlfareNa Indígena Chilena demuestra que no hay en ellas otros elemen- tos, a pesar de la variedad de las combinaciones que hace que cada pieza aparezca distinta a todas las demás. Otro aspecto de esta decoración es el carácter grande de los dibujos, comparados con el de las figuras menudas de la época