Arqueología de la región atacameña

112 RICARDO E. LATCHAM en todo el territorio, antes de la introducción ele los artefactos el e cobre y de bronce y a un después, pero su casi total ausen- cia en las sepu lturas elel interior indica que los inelios no tenían la costumbre de incluirlos en el ajuar fúnebre. Esta falta de herramien tas de piedra en las sepult uras se nota ig ualmen te en las de la región eliagui ta y sospechamos que la ausencia de las pun tas ele flecha y de armas de guerra en general se debe a la mi sma causa . No podemos explicar pI motivo de esta omi s ión , porque sabemoó históricamen te que estos pueb los eran muy guerreros y ten ían fama de valientes y feroces. Sa - bemos tamb ién que sus armas más usuales eran el arco y las fl echas. Laó pequeñas fl echas con puntas de piedra, de hueso y de madera, aprop iadas para la casa de aves o pequeños cuadrúpe- dos, se hallan en cantidades juntas con los cortos y débiles arcos de que hemos habl ado, pero las más grandes y fuertes, de que deben haberse servido en la guerra, faltan, lo que no sucede en las sepulturas costinas . H ab lando d e las sepul turas de la costa, copiamos aquí algu- nos párrafos de uno de los artícu los de Capdevi ll e (1) , refe- rentes a los tipos de puntas de sílice que encontró en la costa de TaIta!' No haremos observac iones sobre las culturas ha- ll adas en este lugar, anter iores a la época chi ncha - atacameña, porque, estud iando las d escripciones del mi smo Capdeville y más especialmente las colecciones que le servían de base, las que hoy existen en el ]\[useo Nacional de Ch ile, juntas con otras tan numerosas y bellas como e ll as, recogidas en la misma localidad, hemos llegado a la concl usión que los atacameños no ll egaron a esta parte de la costa antes del período en cues- t iÓn. Nos concretamos en tonces a sus observaciones sobre las puntas d e síle;, de la última época . Nosotros refundimos en una, dos de las épocas o culturas que quiso establecer; la de los vasos negros y figurados y la de los vasos pintados. Ambas son fases di stintas de la misma cultu ra - la chincha - alacameña, como hemos demostrado al hablar de la alfarería atacameña. Refiriéndose a «las gen - tes de los Vasos negros> d ice lo siguiente «Sus puntas de flechas y de la nzas de si lex de base cóncaya, planas por un lado y convexas por el otro, sus puntas y partes de harpones de huesos, a planados po r un lado. sus hachas de si lex de color, los dan cierta asimi lación a los dolménicos de último tiempo.> (1) <Un cementerio Chincha - Atacameño en Punta Grande, Talta.l· . <Bol. Acad. Nac. de Hist. > Quito, 1923.