Arqueología de la región atacameña

CAPITULO IV ALIMENT ACI O N Caza.-Agricultura.- Riego. - MaÍz.- Quinoa.-Algarrobo.-Pallares .- Zapallos. - Ají. - Papas.-Ganadeda.- Pescado .- Mariscos. Sabemos relativamente poco de la alimentación de los anti- guos atacameños de las primeras épocas, pero colegimos por sus arcos y flechas, sus redes, sus lienzas y anzuelof" sus har- pones, etc. , y por las numerosas conchas marin as que se hallan en sus sepulturas, que eran cazadores y pescadores y que una parte, a lo menos , de su alimentación era la carne, el pescado y los mariscos. En la costa, cazaban y probablemente comían los lobos ma - rinos, y utilizaban los huesos y los cueros, <;:omo se comprueba por los artefactos hechos de ellos, encontrados en las sepu ltu- ras . Es probable que cazaban estos animales con harpones, porque los restos de estas armas, algunas de ellas de tamaño bastante grande, eran muy abundantes en la región. En el interior cazaban los huanacos con arco y flechas o con lipes o boleadoras . En el norte, en la región montañosa de Tara- pacá y Tacna , cazaban también la vicuña y el ciervo, antes abundante en la zona. Que cazaban toda clase de ave se comprueba por las numerosísimas flechas de pequeñab dimen- siones, que no podían haber servido para caza mayor. Pero, es seguro que la base de su alimentación, a contar de la época de Tiahuanaco y quizá antes, la proporcionaba la agricultura , escasa en la costa, pero más abuntlante en el inte- rior, en los valles de los ríos. Así es que hallamos las ruinas de sus principales poblaciones , a lo largo de las escasas corrien- tes de agua que se encontraban en la zona. Muchos de estos ríos o riachuelos eran de corta extensión . Nacían en la alta sierra y después de correr por angostos valles se perd ían luego en los arenales. En estos pequeños valles o quebradas se

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