Manejo fonoaudiológico de la persona con afasia

CAPITULO 10 / EVALUACIÓN DE LOS TRASTORNOS ASOCIADOS A LA AFASIA 69 MANEJO FONOAUDIOLÓGICO DE LA PERSONA CON AFASIA tinta negra lo más rápido posible -dentro de un margen de 45 segundos-. La segunda parte consiste en la denomina- ción del color de impresión de unas equis (XXX). La tercera parte consiste en que el sujeto debe denominar el color en el que están escritos nombres de colores, inhibiendo el contenido verbal. En la versión de Golden se registra el número de ítems logrados en 45 segundos, si el sujeto comete un error se le interrumpe y se le solicita de nue- vo la ejecución del elemento en cuestión. No es necesario anotar los errores, pues se penalizará en un incremento del tiempo requerido para la ejecución (Stroop, 1935). H. Trail Making Test -TMT (Reitan, 1958) • Objetivo: Evaluación de la atención visual sostenida, se- cuenciación, flexibilidad mental, rastreo visual y habilidad grafomotora. • Descripción: Consta de dos partes. Parte A: Se solicita la conexión consecutiva, mediante líneas, de los número 1 al 25 distribuidos al azar en una hoja. Parte B: La conexión debe seguir la misma lógica, pero uniendo números y le- tras de forma alternante. Se realizan unas tareas de ensayo previas a cada parte de la prueba (Reitan, 1958). I. Batería de Evaluación Frontal- Frontal Assessment Bat- tery (Dubois et al ., 2000) • Objetivo: Valoración de las funciones ejecutivas. • Descripción: la prueba plantea preguntas y actividades para evaluar 6 items: a. Conceptualización y razonamiento (analogías) b. Flexibilidad mental (fluidez verbal) c. Programación motora y control ejecutivo de la acción (secuencias motoras) d. Resistencia a la interferencia (instrucciones conflictivas) e. Control inhibitorio (go-no-go) f. Autonomía del ambiente (prehensión) La correcta ejecución de cada subprueba recibe un punta- je de 3, llevando a un puntaje máximo de 18 para la prue- ba. El punto de corte para el déficit frontosubcortical en 16-15, y el punto de corte para la demencia frontosubcor- tical en 13-12 (Dubois et al ., 2000). Luego de haber realizado la descripción de instrumentos de evaluación de diferentes dominios neuropsicológicos, a con- tinuación en la tabla 10-1 muestra la organización de conteni- dos que son recomendados evaluar con sus respectivas prue- bas a utilizar de acuerdo al tipo de afasia que se presente. Tabla 10-1. Evaluación de trastornos neuropsicológicos aso- ciados a la Afasia. Tipo Afasia Dominio a evaluar Test Neuropsicológico Afasia de Broca Funciones Ejecutivas Trail A - FAB Afasia de Wernicke Función Visoconstructiva Cálculo Figura Compleja de Rey Pruebas de Cálculo Afasia Global Funciones Ejecutivas Trail A - FAB Afasia de Conducción Memoria corto plazo Cálculo Función Visoconstructiva Spam de dígitos Pruebas de Cálculo Figura Compleja de Rey Afasia Transcortical Motora Funciones Ejecutivas Memoria Visual Trail A – FAB Figura Compleja de Rey Afasia Transcortical Sensorial Memoria Semántica Percepción Visual Cálculo Orientación derecha- izquierda Test de Palmeras Test Reconocimiento Visual Pruebas de Cálculo Test orientación derecha - izquierda CONCLUSIONES La evaluación del lenguaje está inmersa dentro de una explo- ración cognitiva más global, que es el examen mental, donde el lenguaje, aunque es muy importante, sólo es un dominio más a evaluar. La exploración neurocognitiva considera una completa evaluación de distintas funciones cerebrales, que contempla una buena historia clínica, la aplicación de distin- tas pruebas neurocognitivas en función de lo que requiere el sujeto, una correcta interpretación de los resultados, que debe ser a la luz de todo el examen neuropsicológico y no sólo de pruebas por separado, y finalmente entregar estos resultados a la PcA y/o al profesional que la solicite. En el caso particular de la exploración de la afasia, se debe evaluar, además de los aspectos lingüísticos clásicos, trastor- nos cognitivos asociados pues, en muchas ocasiones, estos ayudan a configurar mejor un determinado síndrome del punto de vista del territorio vascular dañado y, por otro lado, tales alteraciones cognitivas pueden influir directamente en el resultado de la evaluación de la afasia y, por ende, en una mala interpretación clínica. A modo de ejemplo, una PcA po- dría parecer que tiene una comprensión auditiva alterada, pero si coexiste con un síndrome prefrontal dorsolateral este podría influir en la comprensión auditiva por una alteración atencional o de flexibilidad mental y no necesariamente por un defecto en la decodificación auditiva verbal. Otro ejemplo, una persona podría tener dificultades en la denominación por confrontación visual no necesariamente por una anomia afásica sino que por una agnosia visual que afecte el recono- cimiento. Incluso, estos trastornos cognitivos asociados a la afasia si no se consideran, podrían incidir en la efectividad del tratamiento y en el pronóstico del trastorno del lenguaje.En

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=