Policy Brief: Salud bucodental en todas las políticas: población adulta
cifra aumenta considerablemente con la edad. La prevalencia de dentición no funcional (<20 dientes en boca) es de un 27% en la población de 15 o más años en Chile (Bernabe et al., 2020; Ministerio de Salud de Chile, 2019; Morales et al., 2020). En cuanto a enfermedad periodontal, la periodontitis se ubica como el sexto problema de salud más prevalente en la población mundial, y entre los años 1990 y 2010, un 11,2% de la población mundial se encontraba afectada por este diagnós- tico (Kassebaum et al., 2014). En el 2017, el número de pacien- tes con periodontitis severa en el mundo correspondía a 796 millones de personas, equivalente a un 9,8% de la población. En esta misma variante más severa, Gamonal et al. (2010) es- tablecen que dos tercios de la población entre 65 y 74 años y un tercio de la población entre 35 y 44 años presentaba condiciones clínicas compatibles con destrucción periodontal severa en Chile. Estas cifras son mayores a las reportadas a nivel mundial (Gamonal et al., 2010; Morales et al., 2020). La periodontitis es una enfermedad que tiene factores de riesgo comprobados, como el tabaquismo y el pobre con- trol metabólico de la diabetes mellitus, y además comparte patrones de inflamación con otras enfermedades crónicas no transmisibles, como las patologías cardiovasculares y demencia, entre otras (Watt et al., 2019). De hecho, existe evidencia que asocia a la periodontitis severa con las enfer- medades cardiovasculares a través de mecanismos inflama - torios sistemicos (Sanz et al., 2020; Tonetti y Van Dyke, 2013), considerándose como un factor independiente y altamente significativo en las causas y la mortalidad por estas pato - logías en algunos grupos de personas (Linden et al., 2012; Sharma et al., 2016). Teniendo en cuenta toda esta evidencia, la periodontitis podría ser un factor de riesgo no habitual- mente identificado, pero modificable, para distintas enferme - dades del sistema cardiovascular, y su relación está explicada por asociaciones en estudios epidemiológicos, plausibilidad biológica e incluso probada en estudios de intervención. Los múltiples estudios epidemiológicos que relacionan a la periodontitis con las enfermedades cardiovasculares expli- can esta asociación por eventos que se dan en quienes las padecen, como una bacteremia más frecuente, extendida y con patógenos más virulentos en pacientes con periodon- titis (Sanz et al., 2020). Por otra parte, se ha determinado que luego de la terapia periodontal, los pacientes disminu- yen sus niveles de marcadores inflamatorios sist micos, así como niveles séricos de otros marcadores de salud que están relacionados con un mejor estado de salud cardiovascular (Arvanitidis et al., 2017; Demmer et al., 2013; Koppolu et al., 2013; López et al., 2012; Patil y Desai, 2013; Teeuw et al., 2014; Vidal et al., 2013). Políticas públicas en adultos en Chile Los adultos en Chile son beneficiarios de algunas garantías en salud que se materializan a través de programas existen- tes tanto en atención pública como privada. Estos programas tienen por objetivo mejorar y mantener los niveles de salud de los adultos mediante la adquisición de estilos de vida sa- ludables, así como brindar la atención resolutiva cuando es necesario. Algunos de los programas de salud que se ofrecen en el sistema público para pacientes adultos consideran aspectos como la salud sexual y reproductiva, prevención y control enfermedades de transmisión sexual, tratamiento de enfer- medades infecciosas, salud mental, cáncer, discapacidad y rehabilitación, enfermedades no transmisibles, entre otros. El examen de medicina preventiva del adulto (EMPA) es uno de los programas existentes en salud pública y privada, el cual busca monitorear y reducir las posibilidades de sufrir morbi- mortalidad por condiciones que son prevenibles, a lo largo del curso de vida del individuo. Desde el punto de vista práctico, el EMPA funciona utilizando estrategias preventivas teniendo en consideración la edad, sexo y etapa de curso de vida del individuo, y con esto estipula el riesgo de presentar determi- nadas condiciones, para así tratar de prevenirlas o diagnos- ticarlas en un momento en que las intervenciones logren los mejores resultados (Ministerio de Salud de Chile, 2013). Si bien las estrategias preventivas se realizan en todas las etapas del curso vital, uno de los principales enfoques en el grupo de pacientes adultos es la prevención de enfermeda- des crónicas no transmisibles y sus factores de riesgo. Es así que condiciones como el consumo de alcohol, sobrepeso y obesidad, tabaquismo, hipertensión arterial, diabetes melli- tus tipo 2 y dislipidemias son algunos de los problemas ob- jetivos a detectar en la forma más precoz posible (Ministerio de Salud de Chile, 2013). En Chile, el porcentaje de defunciones por condiciones car- diovasculares es de un 25,7% del total de muertes, principal- mente a causa de infarto agudo al miocardio y accidentes cerebro vasculares (Departamento de Estadísticas e Informa- ción en Salud, 2016). Estas cifras han llevado a priorizar a este 4 UNIVERSIDAD DE CHILE Vicerrectoríade Inves tigaciónyDesarrollo INVESTIGACIÓN INNOVACIÓN CREACIÓNARTÍSTICA POLICY BRIEF
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