Cien propuestas para el país que queremos: diálogos al alero de la Universidad de Chile

9 prólogo nueva realidad social. Las mesas fueron formadas por miembros de la sociedad civil, el sector privado y la academia y cubrieron los temas de democracia, educación, salud, medioambiente, cultura, territorio, modernización del Estado, trabajo y desarrollo. La Universidad de Chile cumplió en este momento de nuestra historia nacional con una función primordial, que la caracteriza desde su fundación: contribuir a la definición de la identidad del país. Tal como dijera una vez Valentín Letelier: «La Universidad está destinada a ser un medio social de gobierno, propendiendo a restablecer y conservar la unidad del espíritu nacional». Eso es lo que hemos hecho al abrir este espacio para pensar el país, acoger la reflexión libre de los ciudadanos y facilitar su encuentro con miem- bros del espacio universitario produciendo propuestas y aspiracio- nes que buscan recrear la unidad de un espíritu nacional. Estos trabajos no representan, por lo tanto, propiamente a la Universidad, sino a quienes participaron en el debate. Pero al mis- mo tiempo expresan y resultan del cumplimiento de una las fun- ciones que identifican a la Universidad, sin la cual ella no podría cumplir su misión. Los trabajos generan ideas que son de alto valor para una institución universitaria como la nuestra. Las conclusio- nes de las nueve mesas destacan un nuevo rol para el Estado en la orientación de un desarrollo diferente, así como una sociedad que intenta recuperar su convivencia en torno a otros conceptos centra- dos en la dignidad de las personas, los derechos humanos, la plena igualdad entre hombres y mujeres, la recuperación del territorio y su protección ante la amenaza del calentamiento atmosférico, el valor de la multiculturalidad y la obligación que tiene el Estado de realzarla. Estos textos proyectan a la Universidad, sobre todo en el deba- te y las propuestas sobre educación y salud pública. Como hemos repetido en numerosas oportunidades, revalorar la educación pú- blica es atender la instancia que por excelencia fomenta la cohe- sión social y permite interiorizar un sentido de bien común. De la

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