Juventudes en Chile: miradas de jóvenes que investigan [volumen 2]
320 – juventudes en Chile: miradas de jóvenes que investigan. volumen 2 jóvenes” (Cottet y Galván, 1995). Surgieron, así, diversos enfoques teóricos para trabajarlo, pero aquello que predomina es la mirada remedial de la política, basa- da en la condición de los jóvenes como sujetos anómicos o bien en riesgo psico- social (Goicovic, 2000; Cárdenas, 2011). Lo que se encuentra detrás de los paradigmas que predominaron en la in- cipiente política social juvenil es el control sobre los jóvenes concebidos como un problema —a los que aportan de manera relevante las ciencias sociales y médicas—, ya que se han convertido en un grupo capaz de amenazar el orden establecido mediante la defensa de sus intereses y su modo de ver la sociedad (Cárdenas, 2011). Se le quita, de esta manera, capacidad de agencia a los jóvenes como actores sociales y para la coconstrucción de ciudadanía (Goicovic, 2000). 1.2 Justicia juvenil y delincuencia juvenil Bajo el contexto presentado, no parece casual que desde finales del siglo xix y principios del xx se busque, mediante distintos mecanismos y enfoques, formas de combatir la delincuencia—asociada a la juventud—mediante correccionales, leyes de protección de la infancia, decretos para la prevención de la delincuen- cia juvenil, y hoy en día, un sistema judicial especializado en jóvenes (Tsukame, 2008). Tsukame (2017) señala que la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente (lrpa) —que comienza a gestarse en los años 90, se aprueba en 2005 y se pone en vigencia el año 2007— se inscribe en un contexto de restricciones y limitacio- nes al funcionamiento democrático que impulsó la dictadura cívico-militar de Pinochet. Al respecto, dice: “El déficit de legitimidad del nuevo orden y su afán por limitar la participación popular y las reivindicaciones ciudadanas, coinciden con la instalación de la temática de la seguridad ciudadana y la implementación de las políticas de tolerancia cero” (Tsukame, 2017: 18). De esta manera, se genera una suerte de relación—al menos intencionada— entre jóvenes y delito, que se sustenta en los imaginarios 3 adultocéntricos que promueven las políticas sociales juveniles, amparándose en atribuciones estigma- tizadas de la juventud como son la irresponsabilidad, la búsqueda del placer fácil y disposición a vivir solo el presente (Duarte, 2001). En ese sentido, se señala que la delincuencia juvenil se relaciona con “la crisis de la adolescencia y en ciertas ocasiones se traduce en un acto iniciático, es decir, una forma en que los jóvenes reflejan que han crecido y son independientes de los adultos” (Blanco y Varela, 3 Entendemos por imaginarios sociales “figuras interpretativas de nuestro entorno que le otorgan plausibilidad a una determinada interpretación de “la realidad social”, en la que dicha interpreta- ción —en sus grandes rasgos— es socialmente compartida” (Baeza, 2008: 105).
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=