Juventudes en Chile: miradas de jóvenes que investigan [volumen 2]

Construcción de masculinidades en un liceo emblemático masculino de la comuna de Santiago – 189 triunfa en el deporte sobre un compañero, en videojuegos, en el rendimiento académico, etc. Decir “te violé” es sinónimo de vencer. “La normalización de la violación es la característica principal de esta cultura. En ella, el individuo se ve rodeado cotidianamente por discursos, comportamientos, imágenes y lenguaje que validan y perpetúan la violación (…) (Muñoz, 2016: 7). Esta normalización de la violencia se cristaliza también a través del silbido. Este cobra relevancia para uno de los entrevistados al preguntarle sobre el ma- chismo en el liceo, no solo se aplica entre compañeros con el fin de feminizarse, sino también a profesoras y personas ajenas al establecimiento. A veces, cuando pasan las profesoras, les silban si son bonitas, sobre todo a las que vienen en práctica les silban, o a la señora del quiosco. (Eduardo) Al profundizar si es que en su opinión solo realizan este acto como broma, o es más serio, para el entrevistado: Yo creo que le dicen de verdad, si después el mismo que silba, uno los escucha diciendo cosas como, “que está rica la profe”, igual es como apestoso. (Eduardo) El fenómeno del silbido no solo se realiza hacia las profesoras, sino también hacia el exterior cuando es posible. Con la gente de afuera también, cuando pasan mujeres les silban. Hasta de la ventana a veces le silban a la gente, a las mujeres que van pasando. (Eduardo) De esta forma, el machismo en el liceo es asociado a una subvaloración de lo femenino expresado por medio de la conversación cotidiana, denostando por un lado a las mujeres en general y también por medio de bromas entre compañeros, intentando su feminización constante. Profesoras y personas del exterior sufren también esta forma de violencia, principalmente por medio del silbido, ejercido de forma anónima por los mismos estudiantes. El machismo también se expresa como violencia hacia las personas no he- terosexuales en el liceo, ya que existe una actitud hostil y discriminatoria hacia compañeros homosexuales. La normalización de esta agresión cobra un rol cen- tral, la minimiza, la ubica como no terrible o condenable, para algunos inclusive es algo comprensible, entendiendo que se está en un liceo de hombres. Al con- versar con los estudiantes sobre violencia y bromas derivadas de la orientación sexual de los estudiantes, señalan:

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