Traumatología de la rodilla

Universidad de Chile Rango de Movimiento Existe acuerdo entre los diferentes autores acerca del benefcio que genera la movilización precoz en la cicatrización. La movilización pasiva, activo-asistida y técnicas de movilización articular comienzan desde el postoperatorio inmediato 11 . La movilización activa se restringe hasta alrededor de la semana 5, debido a la tensión que genera sobre el menisco la contracción del isquiotibial que la inserción del bíceps femoral sobre el menisco externo y del semimembranoso 7 . La movilización pasiva y activo-asistida se recomienda efectuarlas solamente hasta los 90° durante las 3 primeras semanas para no generar fuerzas compresivas cíclicas en el menisco. Estos rangos protegidos deben ser especialmente controlados cuando el compromiso es del menisco externo, ya que éste es mucho más móvil. La adherencia capsular es un factor que puede limitar los últimos rangos de extensión generando mayor stress intraarticular, por lo que el control del rango de extensión adquiere gran relevancia. Fortalecimiento muscular Existe discrepancia en la literatura respecto a como realizar el fortalecimiento muscular. se recomienda que el fortalecimiento de cuádriceps se inicie en forma precoz. La cadena abierta tiene la ventaja que genera escasa coactivación del grupo isquiotibial y por ende no tensa el menisco. Rangos de fortalecimiento muscular entre 0° y 60° se recomiendan siempre y cuando no generen aumento de dolor ni sinovitis. Además, que no existan signos evidentes de inhibición muscular artrogénica. Si esto ocurre, lo ideal es, enfocarse en técnicas de feedback propioceptivo e imaginería motora que ayude a mejorar la conciencia del movimiento y así la descarga desde la corteza motora primaria 12 . Por el contrario, el fortalecimiento de cuádriceps en cadena cerrada tiene 2 grandes aspectos que hay que considerar: la ya mencionada contracción del isquiotibial y la mayor tendencia al valgo o varo de rodilla además de rotaciones tibiales y femorales. Estas alteraciones cinemáticas generan mayores fuerzas de cizalla, que son dañinas independiente del tipo de rotura y sutura empleada. Para controlarla de forma idónea se sugiere comenzar con cadenas cerradas con carga parcial como el press pierna y con entrenamiento de ambas extremidades. El ángulo de fexión no debe superar los 60° para no tensar la sutura ni generar compresión meniscal 13 . La progresión en cuanto a carga y angulación debe considerar que la cinemática del movimiento sea adecuada. Se recomienda que el fortalecimiento aislado del isquiotibial se inicie después de los 3 meses 10 . Es importante que el entrenamiento neuromuscular con focalización externa sea incorporando en forma progresiva para permitir el óptimo alineamiento cinemático, sin exceso de atención en la patología 14 . El entrenamiento de todo el core lumbopélvico es relevante para mantener el alineamiento de las extremidades inferiores, independiente de la actividad funcional 15 . El entrenamiento del core puede comenzar en forma precoz en la rehabilitación evitando la posición bípeda. Criterios de reintegro deportivo El retorno a la actividad deportiva sin una adecuada estabilidad funcional se correlaciona con peores resultados. Debido a lo difícil que es reparar el menisco se sugiere que el reintegro deportivo se realice en forma progresiva, comenzando con entrenamientos estáticos en superfcies estables y progresivamente aumentando el nivel de inestabilidad. 281

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