El patrimonio arquitectónico industrial en torno al ex ferrocarril de circunvalación de Santiago: testimonio del desarrollo industrial manufacturero en el siglo XX
ciones generales desarrolladas por Osear Muñoz en 1968 y Ricardo Lagos en 1971 para afirmar bajo sus propias conclusiones que el punto de partida de la industrialización ha– bría estado relacionado con las necesidades y urgencias surgidas con motivo de la Guerra del Pacífico. Para Kirsch, negar la existencia de actividad industrial en forma previa a 1930 estaba fundamentado en el desconocimiento de los períodos de expansión y con– tracción, en la ausencia de análisis respecto a las diferencias en los niveles de producción e índices de crecimiento y en la omisión de estudios sobre la composición estructural de la producción anterior a dicha década. Agregaba que quienes negaban dicha existencia, se basaban fundamentalmente en la falta de una política proteccionista 7 • Cabe mencionar otros trabajos importantes en torno al punto in comento como son los de Luis Ortega y Gabriel Palma. Ortega incluso detalla, tanto el número como la enverga– dura de los establecimientos fabriles que comienzan a multiplicarse ininterrumpidamente a partir de 1860 en Chile en un proceso de transformación de las actividades artesanales en manufactureras 8 . Palma sitúa los orígenes de la industrialización en el período precrisis de 1916 en atención a que los excedentes de las exportaciones del salitre permitieron impor– tar los insumos y materias primas necesarias para el funcionamiento y desarrollo de un in– teresante sector industrial el cual dependía fuertemente de las fluctuaciones de producción y precios del nitrato. Tanto Ortega como Palma, no analizan los problemas de las políticas fiscales globales ni las políticas arancelarias específicas aplicadas y más bien se dedican a evaluar cuantitativamente el fenómeno tratando de evaluar algunos alcances técnicos y metodológicos que permiten hablar precisamente de la presencia de un sector industrial. Carmagnani enfatiza la existencia de una industria liviana entre 1870 y 1895 que se incrementa en los años siguientes centrando el análisis en las estadísticas de la época, en la relación entre el desarrollo industrial y las políticas económicas con la economía nacional e internacional 9 • Como conclusión a partir de estos trabajos y como marco cronológico definido para el presente estudio, coincidimos con la postura que plantea la existencia de un sector industrial en Chile en forma previa a 1930; y el desarrollo efectivo de un proceso de industrialización a partir de ese momento. Independientemente de las opciones tomadas en el sentido de reforzar estructuras económicas y de especialización productiva, la economía chilena experimentó momen– tos no sólo coyunturales sino de mediana duración en el tiempo que le permitieron gozar de crecimientos económicos que a su vez favorecieron rasgos de urbanización notorios. Sin embargo estos índices de crecimiento no se consolidaron como una tendencia conti– nua, sino que se diluyeron dejando un grupo dirigente poderoso en un ámbito nacional en vías de modernización, inmerso en una sociedad tradicional que limitaba las posibili– dades de desarrollo real. Kirsch, William H. The Industrialization of Chile, 1880-1930, P. L. Diss ed. The University of Florida, USA, 1978, Introducción y Cap. 1. Ortega, Luis, A cerca de los Orígenes de la Industrialización Chilena, 1860-1879, en Nueva Historia Nº 2, Londres, Inglaterra. 1981 , pp. 3-64. Palma, Gabriel, Chile 1914-1935, de Economía Exportadora a Sustitutiva de Importaciones, en Nueva Historia, año 2, Nº 7, Londres, Inglaterra . 1982: pp. 165-192. Caviéres, Eduardo, 1998, op. cit., p. 16. 42
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