Reforma Agraria chilena: causas, fases y balance

Reforma Agraria Chilena: causas, fases y balance 47 Al 31 de mayo de 1973 había 1.073 Asentamientos, 1.537 Comités Campesinos, 152 Cooperativas, 274 Centros de Reforma Agraria (CERA) y 62 Centros de Produc- ción (CEPROS). Sobre los avatares, conflictos locales, tensiones, tomas, etc. de esta etapa se han escrito numerosos estudios. Como todo proceso político tuvo los típicos problemas de su puesta en marcha y de su ejecución, con sectores muy descontentos, con pro- ceso locales incontrolables por los poderes centrales, con aplicaciones arbitrarias en algunos casos, en fin, con éxitos y fracasos. No obstante, el objetivo fundamental se cumplió y el balance fue positivo, pues, con expropiaciones e incluso con el período de devolución de muchas tierras y de división de predios en parcelas, se logró erradi- car definitivamente el complejo latifundio-minifundio de características hacendares precapitalistas. Desapareció la relación servil inquilino-patrón y sus sistemas de uso de la tierra. Ese fue el éxito de la Reforma Agraria mirada en una perspectiva histórica. Los planteamientos economicistas que analizan esta etapa como un balance contable de unos pocos años, no resisten análisis. Es obvio que el proceso escapa totalmente del análisis reduccionista de una solo disciplina. Estudiar el proceso exige un enfoque multidimensional y, en lo posible, interdisciplinario. Pero incluso, si se aplicaran las técnicas de evaluación de la economía tradicional, el proceso de Reforma Agraria sería evaluado como altamente positivo si se le otorgara el valor real a dos temas: valor infinito positivo a la dignidad campesina y valor infinito negativo a la represión masiva. 2.3 Fase de transformaciones estructurales en el período 1973 – 1980 La mirada del proceso de Reforma Agraria no puede detenerse en septiembre de 1973. Sí lo que tuvo un abrupto final fue el período de Dignificación Campesina. La reforma siguió adelante porque se siguió transformando el complejo latifundio-mi- nifundio. El golpe militar puso fin a los predios comunitarios y colectivos, dividién- dolos, creando parcelas y devolviendo muchas tierras a algunos empresarios que habían sido expropiados y traspasando otras a organismos públicos y de defensa. El golpe militar dio un giro violento al proceso, dándole un rumbomuy diferente. Este período se le denominó “La Contra Reforma Agraria”. Pero, mirado el proceso desde una perspectiva histórica, en 1973 no terminó la Reforma Agraria sino que en un área se inició un nuevo proceso de reforma, diametralmente opuesto al ante- rior. Hay que destacar que este nuevo rumbo nunca estuvo encaminado a volver al latifundio-minifundio de características precapitalistas con formas de subtenencias en las que predominaba el inquilinaje. Por ello que sus planificadores, más allá de acciones reivindicativas y violentas que se hicieron, encaminaron sus cambios a que se permitiera el desarrollo capitalista del campo, dejando atrás las tenencias y subte- nencias que condicionaban este desarrollo.