Desafíos críticos para Latinoamérica y el Caribe

28 ternacional. En este contexto, autores como Keohane (1993) plantean que los Estados cooperan en el marco de organizaciones internacionales ya que ello constituye una manera menos costosa para ejercer su poder. En este enfoque, las instituciones juegan un rol clave en tanto moldean el comportamiento de los actores. Considerando el contexto actual, puede afirmarse que el inicio de la pandemia del Covid- 19 en Europa estuvo marcado por actos casi piratescos, como la incautación de productos médicos 7 , tras lo cual la reacción de los gobiernos fue avanzar en la búsqueda de soluciones coordinadas a nivel regional. Unos meses después se aprobó el Plan europeo de recuperación. Este tránsito fue posible en un contexto ins- titucionalizado como la UE, en el que los intereses recíprocos fueron capaces de eclipsar a los intereses en conflicto y propiciar la cooperación (Axelrod, 1985). Estos intereses recíprocos descansan en finalidades geopolíticas, así como el multilateralismo y la se- curitización de la AOD (Sanahuja, 2005). Tal como el Plan Marshall buscaba ayudar a la reconstrucción de Europa para frenar la influencia soviética de manera de mantener la hegemonía estadounidense, teniéndola como aliada. El Plan europeo de recuperación que propuso la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, tiene un propósito geopolítico, cual es, darle significado a la pertenencia a la UE, reencantar a los europeos con Europa, especialmente tras la grieta provocada por el Brexit y los bajos porcentajes de apoyo de los ciudadanos a las instituciones europeas. A diferencia del original, hoy es Europa quién se ofrece a sí misma un Plan Marshall. No es azar que la presidenta lo haya citado como ejemplo, los simbolismos son importantes, es un símbolo de su “ambición de convertir a la UE en una verdadera unión geopolítica, capaz de competir a la par con gigantes como Estados Unidos y China” (Pirozzi, 2020) . En Latinoamérica, aún no se produce el tránsito desde la atomización hacia la cooperación, y no sólo por razones coyunturales como la actual presidencia de Brasil, que resta a un importante actor en la región de la posibilidad de establecer alianzas, sino también por nuestra dificultad histórica de construir intereses recíprocos de la región, producto tal vez de las grandes desigualdades que polarizan a las personas y sus gobiernos, restringiendo la posibilidad de acuerdos a países con cercanías ideológicas pero sin alcance regional. Tal como advierte Keohane (1984) la búsqueda miope del interés propio pue- de ser desastrosa, pero en la medida que se perciba la ventaja que ofrece la colaboración en el largo plazo, la estabilidad de la reciprocidad, de la transparencia, en oposición al sálvese quien pueda, abre la posibilidad de propender hacia la cooperación. Por otro lado, dentro de las corrientes que ponen énfasis en las “motivaciones altruistas” para expli- car la cooperación internacional, se destacan los enfoques constructivistas. Autores como Lumsdaine (1993) afirman que es incorrecto considerar únicamente motivaciones asociadas a intereses econó- micos y políticos de los donantes, debiéndose tener en cuenta además razones de tipo humanitario y convicciones igualitarias. En la misma línea, Ridell (1987) considera que circunstancias tales como las necesidades de los pobres, la existencia de relaciones desiguales entre los países y la posibilidad de compensarlas favorecen la existencia de un marco ético por el cual los Estados más ricos promueven el desarrollo de los más desfavorecidos. Por su parte, Pauselli (2013) afirma que desde comienzos del siglo actual se han propuesto explicacio- nes que intentan conjugar las escuelas anteriores, reconociendo la existencia de factores diversos que influyen en la asignación de la ayuda externa. Se mencionan como ejemplos los estudios de Montúfar (2001), que reconoce la interacción entre intereses, instituciones e ideas, y de Sogge (2002), que plantea la existencia de “una combinación de intereses comerciales, estratégicos y humanitarios por parte de 7 Un caso tuvo lugar durante una operación de transbordo en el puerto de Gioia, en el que las autoridades aduaneras italianas incautaron 364.200 pares de guantes quirúrgicos provenientes de Malasia y 9.720 dispositivos para intubación traqueal provenien- tes de China, insumos médicos cuyo destino era Francia (Hoekman et al, 2020).