Desafíos críticos para Latinoamérica y el Caribe

250 cual por primera vez se manifestaban en contra de la brecha salarial entre profesores y profesoras, esta denuncia no solo evidenciaba una inequidad salarial si no que también lograba exponer una realidad social, esta publicación fue significativa ya que, gracias a esta comenzaron las presiones por parte de las mujeres hasta que lograran nivelarse los sueldos, al menos en este sector. Años más tarde, es fundada por Dolores Correa Zapata y Luz Fernández la revista “la mujer mexicana” (1904). Esta revista se caracterizó por su insistencia en la integración social y laboral por medio del de- sarrollo profesional de las mujeres en México. Se diferenciaban de los periódicos ya mencionados por su sentido progresista y por promover el feminismo como solución a todos los males ya que era ese instrumento emancipador de las mujeres, por lo que desde sus publicaciones hacían un llamado a la autosuficiencia 2 . Su último año de publicación fue 1906. Cada periódico o revista no duró el tiempo esperado, pero es de resaltar que todas y cada una de estas mujeres que, desde esa época dedicaron su vida a cuestionar por medio del periodismo esa dependen- cia impuesta por los hombres sembraron un legado el cual, al ir trascendiendo fue concediendo cam- bios sociopolíticos en beneficio de la mujer mexicana, por lo que durante la primera década de 1900 varias mujeres participaron en grupos políticos 3 . A partir de 1916 comienzan a aparecer los primeros congresos feministas, los cuales tuvieron lugar principalmente en Tabasco y Yucatán 4 . Estos espacios, sirvieron para que las mujeres también pudie- ran exigir una igualdad en los derechos sindicales y salariales, y que surgieran las primeras intenciones de organización, aunque esta se vino a estructurar y a tener mayor connotación a partir de 1935, año donde surge “el frente único pro derechos de la mujer” (FUPDM) desde donde se extendió un llamado a “todas las organizaciones femeninas a organizar el Frente Único, levantando ya, con mayor claridad la demanda de las mujeres, los derechos civiles y políticos” ( Galindo, H. mujeres y constitución. 2017) en este sentido, convocaban a un movimiento masivo, dentro del cual cabían desde mujeres comunistas, hasta liberales. Pues si bien era una lucha política, no exigía una distinción dentro de una corriente polí- tica específica, sino más bien un trabajo colectivo para alcanzar los derechos al sufragio y a la ciudada- nía que como mexicanas les pertenecía. La lucha por el voto no solo era importante por cuestiones de participación, si no como estrategia, pues en palabras de la Doctora Matilde Rodríguez (1937) “el voto puede ser uno de los medios más efectivos para interesar y capacitar a todas las mujeres para luchar por sus propias demandas laborales, económicas y sociales” por lo que desde ese momento ya se tenía un ideario de lo que vendría después de lograr el sufragio. Para 1937 el presidente de la época, presento una iniciativa para dar paso al reconocimiento de la mujer como ciudadana. Sin embargo, fue hasta 1938 que la cámara de diputados aprobó el dictamen concediendo el voto a la mujer. Empero a esta “aprobación” no se logró materializar y de hecho quedó invalidada, causando como efecto la disolución FUPDM. Sin embargo, tras un proceso de largas luchas por parte de las mujeres, en 1953 lograron su derecho a votar y a ser candidatas a elecciones naciona- les. En 1955 ejercen por primera vez su derecho al sufragio participando en las elecciones de ese año. DE CARA A UN MOVIMIENTO NACIENTE: FEMINISMO HISTÓRICO Para 1970 nace un nuevo movimiento más bien conocido como “la nueva ola del feminismo mexica- 2 Por lo que estas mujeres además de sembrar despertares en las demás, también fueron pioneras en el desarrollo profesional de las mujeres en México.   3 luego de la creación de la sociedad protectora de la mujer (1904) entraron a participar en grupos y partidos políticos de oposición al gobierno de la época, claramente dirigidos por hombres, en donde la participación de la mujer no implicaba el voto ni mucho menos la ocupación de cargos públicos .   4 en esos congresos, mujeres de distintas zonas del país se congregaron para abordar y discutir cuales eran los derechos que el gobierno debía reconocer a las mujeres, entre ellos el derecho de ser ciudadanas legalmente, esto es tener derecho a votar y ser votadas en cualquier tipo de elección popular (Los Movimientos Feministas en México: Del Discurso a la Realidad 1975-2015)