¿Quién dijo que no se puede? Escuelas efectivas en sectores de pobreza

E S C U E L A S E F E C T I V A S E N S E C T O R E S D E P O B R E Z A Escuela E-138 Emi l ia Romagna 242 SEGUNDA PARTE Una gestión efectiva y participativa Uno de los aspectos más destacables de la escuela es la capacidad que ha generado para formular, postular y adjudicarse proyectos. Esta capacidad se ha fortalecido con el tiempo constituyéndose en un pilar para los buenos resultados que se están obteniendo. Actualmente, se encuentran participando en programas como la JEC, la red Enlaces, Proyectos de Mejoramiento Escolar (PME), Programa de Alimentación Escolar (PAE), Programa de Salud Escolar, Proyecto Iberoamericano de Informática Aulas Unidas, un proyecto FONADIS para los alumnos de Integración Educativa, y también en programas de CONACE y MIRAME orientados a la prevención en el consumo de drogas. Gran parte del equipamiento con que hoy cuenta esta escuela es fruto de su participación en diversos fondos concursables. Otro de los elementos que resalta en la gestión se relaciona con el trabajo en equipo. Se dan amplios espacios de participación y trabajan muy cooperativamente. Esto es valorado por los profesores, quienes hacen uso de sus instancias de participación para proponer y tomar decisiones en conjunto con la dirección y los demás docentes. Dentro de las más importantes se encuentran las jornadas técnicas (una vez por semana, profesores agrupados por cursos paralelos en primer ciclo y por sector de aprendizaje en el segundo ciclo), las reuniones de planificación y las comisiones para tratar algún tema específico. Éstas y otras instancias se utilizan fundamentalmente para intercambiar experiencias y metodologías, lo cual, según los profesores, ha tenido positivas consecuencias en el plano académico: “Desde hace ya varios años que venimos trabajando harto en equipo. Nos organizamos por ciclo y compartimos nuestras metodologías. Hemos aprendido bastante de los colegas y eso al final se termina transmitiendo a los chicos” . Además de la fuerza que tiene el trabajo en equipo, la directora se ha encargado de delegar funciones y la mayoría de los profesores tiene algún cargo relevante dentro de la escuela (coordinación de proyectos, coordinador de las actividades extraescolares, salud escolar, asesores del centro de padres, bienestar, etc.). Esto, a juicio de los profesores, “hace que nos comprometamos más con la escuela porque cumplimos funciones importantes. Tenemos una responsabilidad a la que hay que responder”. Finalmente, se debe destacar el apoyo de una secretaria encargada de labores administrativas, que anteriormente recargaban el trabajo de la directora y de algunos profesores, el cual ha contribuido a una mejor gestión de la escuela. Una escuela que utiliza al máximo sus recursos Otro de los elementos distintivos de la escuela es el buen uso que se da a los recursos que ha logrado conseguir. Así, por ejemplo, se aprovecha al máximo el material computacional con que cuentan, estableciendo turnos, utilizándolo en un alto porcentaje de las clases y expandiendo su uso incluso a los padres y apoderados. No hay materiales ni equipos desocupados. Los niños respetan y cuidan notoriamente su infraestructura y equipamiento pues se sienten dueños de los recursos que hay en su escuela (cuidan de no rayar las murallas y mantener limpios los baños, fruto de un aprendizaje relacionado con la higiene). Los alumnos nunca son privados de la posibilidad de utilizar estos recursos y se les saca el mayor provecho posible, abriéndolos y facilitándolos a padres, apoderados y a la comunidad en general.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=