Asistencia Técnica Educativa en Chile: ¿aporte al mejoramiento escolar?

68 Asistencia Técnica Educativa en Chile: ¿Aporte al Mejoramiento Escolar? pregunta que remite a un impacto del programa sobre objetivos que están más allá de su radio de acción. Paradójicamente, aunque varios de los programas estudiados han generado bastante información al respecto (incluyendo algunos que construyeron una línea base con evaluaciones pre-programa), ninguno de ellos cuenta con estudios adecuados de evaluación de impacto. La segunda pregunta es si los programas ATE modificaron las formas de ense- ñanza de los profesores. Responderla supondría no solo levantar información válida sobre las actuales prácticas pedagógicas de los docentes participantes, sino conocer cuáles eran las formas de enseñanza que implementaban previa- mente. Ninguno de los casos estudiados cuenta con este tipo de evidencia. A cambio, como se mencionó, algunos de los programas generan evidencia em- pírica acerca de actividades pedagógicas específicas, directamente promovidas por la intervención. En este caso es más sencillo considerar la ocurrencia de dichas prácticas como un efecto directo del programa. En tercer lugar hemos distinguido las prácticas de enseñanza de otras caracte- rísticas relevantes de los docentes, como sus conocimientos y capacidades. En rigor, todos los programas estudiados de una u otra forma se plantean impactar directamente este dominio; además, se trata de un ámbito en el cual existe cierta batería de instrumentos de medición disponibles o que no debiese ser tan problemático diseñar. Sin embargo, no tuvimos conocimiento de que los programas estudiados generasen este tipo de información. Esto constituye una limitación importante por cuanto la profundidad y coherencia del cambio peda- gógico intencionado están fuertemente ligadas a la adquisición, por parte de los docentes, de nuevos conocimientos y capacidades profesionales. La cuarta y quinta preguntas se refieren a si los programas ATE mejoran la ges- tión técnico-pedagógica y la gestión institucional de la escuela, respectivamente. Se trata de las dos dimensiones más directa e intensivamente intervenidas por los casos estudiados. En estos dominios los programas ATE proponen a las escuelas planes de trabajo relativamente estructurados. Así, indagar sobre si los progra- mas están logrando afectar estos niveles requiere obtener un tipo de evidencia muy cercano al monitoreo de la implementación del programa en las escuelas, lo que se conoce como evaluaciones de procesos. Por cierto, a cada intervención de los programas se asocian respuestas esperadas por parte de la comunidad edu- cativa, que hacen que indagar sobre la efectividad de los programas a este nivel sea algo más que la simple constatación de su ejecución. Aunque el estudio re- copiló bastante información acerca de la implementación de estos cambios en las escuelas, no fue posible hallar evidencia rigurosa acerca de efectos más per- manentes o generalizados en las prácticas de gestión institucional y pedagógica

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=