La agenda pendiente en educación: profesores, administradores y recursos: propuestas para la nueva arquitectura de la educación chilena

119 Dagmar Raczynski, Daniel Salinas frente al tema y desarrollen prácticas coherentes al respecto, las que deben ser también congruentes con la postura y prácticas del sostenedor y de las autoridades municipales. Sin embargo, se observa que, salvo excepciones, las municipalidades no tienen postura explícita en torno a la incorporación de los padres en la gestión escolar, más allá del requisito formal de contar con centro de padres y consejo escolar. La forma en que se da la relación padres-colegio es decisión de los establecimientos o de cada padre in- dividualmente. Es frecuente observar que la relación del sostenedor con los padres se reduce a reclamos de estos sobre el colegio, el trato de un director o un docente, la suspensión de un alumno, etcétera. El reclamo termina con frecuencia en una orden del sostenedor que desautoriza una decisión del colegio. En síntesis, el tema se restringe a acciones coyuntura- les frente a las cuales los agentes involucrados no suelen actuar de modo coherente. En otro plano, si bien los DAEM y corporaciones realizan rendiciones públicas de su gestión frente al Concejo Municipal, estas instancias rara vez tienen asistencia de organizaciones como centros de padres u otras, constitu- yéndose en instancias meramente políticas en que los concejales asumen la función de representantes de los intereses de la comunidad. El apoyo social a los estudiantes Todos los municipios ponen a disposición de los alumnos un conjunto variable de servicios y beneficios sociales. La mayor parte de ellos deriva de la red social que llega desde el nivel central (Junaeb, OPD, Cosam, Chile So- lidario, etc.), a los que se suman apoyos específicos desarrollados en el nivel local (becas municipales, transporte escolar en áreas rurales, distribución de uniformes y útiles escolares, alfabetización de adultos-apoderados). En esta materia las Direcciones de Desarrollo Comunitario —Dide- co— y los departamentos sociales municipales son activos y apoyan la labor en los colegios, cada uno con lo que está a su alcance. Adicional- mente, algunos municipios han integrado al equipo municipal, DAEM o corporación, expertos en las problemáticas que enfrentan los alumnos y la familia. El profesional contratado con mayor frecuencia es un psicólogo cuya labor es hacer diagnósticos de los niños y sus dificultades de apren- dizaje, y apoyar a los colegios con charlas a los padres y a los alumnos. Estas acciones en algunos municipios son parte de programas centrales. En los municipios que tienen una mirada estratégica en la gestión de la educación, están incorporados y se manejan en función de los objetivos educacionales que persiguen, además de cumplir con las metas adminis- trativas que impone cada municipio.

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