Andrés Bello: libertad, imperio, estilo

780 patriota, pero habiendo sido secuestrado y trasladado a Santiago por la oposición, abjuró de esa causa revoltosa y volvió al ya desasose- gado seno de la monarquía. Según Domingo Amunátegui Solar, las letras no eran lo que distinguía a los partidarios del rey, y por eso el padre de la Torre se vio en la necesidad de escribir el mismo todos los artículos de la gaceta y firmarlos con distintos nombres, para que se pensara que mucha gente colaboraba con esa publicación. Finalmen- te, durante la Patria Nueva, el cura enmendó el curso y retornó a su causa original, solicitando se le absolviera del ostracismo que vivía en Mendoza. Afirmaba este escritor de heterónimos que los realistas ha- bían doblegado su mano, “pero no su corazón”. Domingo Amunátegui Solar nos dice que la prosa de este clérigo —que nunca visitó Europa ni tampoco salió del entonces minúsculo Chile— era clara, transpa- rente, de todos entendible. 206 En los primeros nueve años de la Patria Nueva la literatura se re- dujo a ciertos periódicos que no alcanzaron cada uno más de ochenta números. Morían por falta de suscriptores. 207 El ánimo meramente político de estos escritores es justificado así por Amunátegui Solar: Gobernadas estas lejanas y extensísimas colonias por un rey que vivía en Europa, y nunca deseó conocerlas, progresaban con len- titud desesperante. Los escritores que vieron por primera vez la luz en ese período de transición que se extiende desde los fines de la Colonia a los principios de la República, sintieron y escribieron dominados por el espíritu revolucionario. 208 Domingo Amunátegui Solar solo encuentra “literatura” de esa época en escritos de hálito político, apologías y publicidad procedente de uno y otro bando, especialmente del patriota. Considera difícil ha- llar a la historia como género autónomo entre los periódicos y pas- quines de la época, o en las memorias que se escribían, a las cuales acusa de estar muy teñidas de enfrentamientos ideológicos: primero 206 Ibid ., pp. 14 - 6 . 207 Ibid., p. 20 . 208 Ibid., p. 166 .