Andrés Bello: libertad, imperio, estilo

640 de la recepción del Fausto de Goethe: “Inclusive en el lejano Chile —escribe Rusker— se le prestó atención [a Goethe]; allí empezó Ma- nuel Antonio Matta en los años cuarenta su traducción del Fausto en verso, que, por cierto, no apareció hasta 1907 ”. 511 En 1866 , en cambio, el poeta gauchesco Estanislao del Campo publicaría su propia versión de la obra (Fausto, Impresiones del gaucho Anastasio el Pollo en la re- presentación de esta ó pera) , un poema criollo cómico y triste, donde el gaucho Anastasio cuenta a don Laguna la experiencia que ha tenido al contemplar cómo “el Dotor Fausto” pactaba con “Mandinga”, todo frente a mucha gente que apenas se escandalizaba. 512 Lo que contaba el gaucho no era sino una representación en el teatro Colón (en el antiguo edificio) del Fausto , la ópera de Gounod, que él creía una rea- lidad. En términos de la “imitación” bellista, el Fausto de Estanislao del Campo es notablemente más creativo y arriesgado que la hermosa traducción en verso de Matta. Estanislao del Campo logró un poema clásico argentino; la traducción de Matta, en cambio, se mantuvo des- conocida por mucho tiempo (y todavía). imitación científica En el ámbito de la ciencia, los poderes como divulgador e imitador de Andrés Bello adquieren dimensiones cosmológicas en su Cosmogra- fía . Cuando nos referimos a las investigaciones cosmológicas de Bello, mostré que su visión imperial tenía un correlato cósmico. El interés por la astronomía como sistema complejo poseía además pábulo en el esti- lo. La Cosmografía fue escrita para ser entendida por los chilenos; ni si- quiera por los americanos, que no tenían por qué manejar coordenadas de la geografía y el paisaje chileno para poder concebir dimensiones as- tronómicas. Bello recurre a la experiencia de ciertos frutos por el tacto: [L]a figura de la Tierra se acerca mucho a la de una esfera per- fecta. Los montes que nos parecen dar una forma tan irregular a 511 Rukser ( 1990 , p. 124 ). 512 Del Campo ( 1960 ).