Andrés Bello: libertad, imperio, estilo

577 aliados y contrincantes Bello fue, según he dicho, un hombre de pluma, un contador de las sílabas métricas después de la batalla (dice Borges acaso sobre sí mis- mo), en una época donde hubo destacados personajes que fueron a la vez guerreros y literatos (un poco periodistas, legisladores, poetas, historiadores; un poco a medias). En el fragor de esta época convulsa, Bello se sumergió en estudios filológicos. Esos estudios no eran tan áridos como pudiera pensar- se: estaban dedicados a épocas, plagadas de viejos guerreros, seres sobrenaturales, política y antiguo Derecho. Al salir a la superficie de sus estudios en Londres, Bello aparecerá redactando los varios números de La Biblioteca Americana y después El Repertorio Ame- ricano , junto a su comparsa, Juan García del Río. Este desconocido personaje fue un hombre de armas, de letras y de la política, que se movió por todas las nuevas repúblicas hispanas de la costa del Pa- cífico, pero que se extinguió sin ninguna gloria. Guillermo Guitarte vio entre ambos una dupla en la que García del Río ponía los ánimos iniciales y Andrés Bello el ánimo constante; esta fórmula habría per- mitido que los proyectos periodísticos y literarios de García del Río fructificaran en Londres. 367 367 Guitarte ( 1969 , pp. 72 - 3 ).

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