Andrés Bello: libertad, imperio, estilo

246 años, según la frase magnífica de Juan Vicente González ‘sabían a san- gre los frutos de la tierra’”, 98 Bello sostenía que tan solo ella y Chile habían alcanzado el orden. Ser común a ambos estados le apasionaba. Ambos eran el ejemplo para los demás; habían sufrido los mismos tropiezos y prosperaron. Ocurre que, al parecer de Bello, Venezuela y Chile “disfrutan de to- dos los bienes de la paz pública y del orden legal”. Son naciones en la senda de la “felicidad”, que ya no viven en la “infancia” de los demás estados americanos; que han hecho la diferencia entre “el orden y la anarquía, la exaltación y la prudencia”. 99 Bello intenta, con este ejemplo, demostrar que dos naciones tan lejanas, tan apartadas la una de la otra, logran similares “adelanta- mientos”, no para probar una manifiesta excepcionalidad, sino para todo lo contrario. 100 Dice Bello, a propósito de la edificación de estas nuevas repúblicas, que: En esta obra, protestamos que jamás ha entrado la menor parte de vanidad o jactancia, o el ridículo orgullo de presentarnos a los ojos del mundo como un pueblo excepcional entre los que tuvieron el mismo origen, o como especialmente llamados a diferentes desti- nos que los demás, semejante superficialidad sería indigna del ca- rácter del país, y de la experiencia que acerca de la inestabilidad de las cosas públicas en los países nacientes hemos llegado a adquirir a costa de los grandes sacrificios y desgracias que hemos arrostrado en común con las nuevas naciones americanas. 101 Bello sostiene que tiene confianza en que todas las naciones america- nas podrán hermanarse y “caminar juntas por la vía del orden hacia las mejoras sólidas y la mayor dicha social”. 102 98 Blanco-Fombona ( 1966 , p. 257 ). 99 “Aniversario de la victoria de Chacabuco”, en Bello (Vol. XXIII, p. 119 ). 100 Una de esas curiosidades Bello la anota en el artículo 867 (k) . Ver Gramática , en Bello (Vol. IV, pp. 247 - 8 ). 101 “Aniversario de la victoria de Chacabuco”, en Bello (Vol. XXIII, p. 120 ). 102 Ibid. , p. 122 .