Rutas hidrológicas : recordando a un colega por los senderos de la hidrología

M UÑOZ -C ASTRO ET AL . I DENTIFICABILIDAD EN MODELOS HIDROLÓGICOS GR4J R UTAS H IDROLÓGICAS 35 contrastes, tanto de norte a sur y de este a oeste. La transición desde un clima tropical desértico y semi desértico en el norte, pasando por mediterráneo en el centro, hacia templado oceánico y sub – polar oceánico en el sur (Zhao et al., 2016), es sólo una muestra de ello, ya que la expresión local del mismo, determina, por ejemplo, la vegetación natural que existe en cada zona (DGA, 2016). En línea con esta variabilidad, las funciones de densidad acumulada (CDF o FDC) muestran que, en término de promedios anuales, las 127 cuencas seleccionadas varían su temperatura media desde 0,3 a 14,4°C, con montos de precipitación de 0,3- 10,1 mm d -1 (Figura 2). La escorrentía media anual varía entre 0,02 a 18,4 mm d -1 , mientras que la ETP estimada a partir del método de Oudin et al. (2005) tiene valores que van desde 0,78 a 2,66 mm d -1 . En línea con los resultados reportados por Newman et al. (2015), es evidente que la precipitación no es suficiente para explicar por sí sola la generación de escorrentía en algunas cuencas. La Figura 3 muestra las CDFs de varios descriptores físicos del conjunto de cuencas, cuyas áreas van desde los 35 a 12.429 km 2 , con elevaciones medias que varían entre 120 y 4700 m.s.n.m. aproximadamente. El 51% de las cuencas en estudio tienen una elevación media menor a los 1.000 m s.n.m., mientras que un 26% está en el rango 1.000-2.000 m s.n.m. y el 23% restante por sobre los 2.000 m s.n.m. Considerando el rango de elevación media, resulta coherente que la pendiente media de las cuencas en estudio varíe en un orden de magnitud, con valores entre 55 y 302 m km -1 . Tomando en cuenta las significativas diferencias que existen en el conjunto de cuencas seleccionadas, tanto hidroclimáticas como físicas, resulta evidente que uno de los desafíos del presente estudio es simular los diferentes sistemas hidrológicos, capturando procesos y componentes que determinan la respuesta hidrológica a la escala de cuenca. La Figura 4 muestra el índice de escorrentía (Escorrentía observada recuperada de CAMELS-CL / precipitación CR2Met agregada a escala de cuenca) versus el inverso del índice de aridez (i.e., P/ETP), observándose que hay algunas cuencas que exceden el límite de agua (i.e., Q obs /P > 1), lo cual indica que sale más agua de la que entra a la cuenca en forma de precipitación. En particular, 17 cuencas exceden este límite, mientras que 7 se encuentran cercano a él (Qobs/P > 0,9). Por otro lado, hay 25 cuencas que exceden el límite de energía, representado por la línea curva (Qobs/P = 1 – ETP/P) que se muestra en la figura. Lo anterior, indica un exceso de agua en la cuenca. Considerando el déficit/exceso de agua observado en algunos puntos de la Figura 4, resulta evidente la necesidad de corregir los registros de precipitación utilizados y/o revisar los controles fluviométricos asociados. A pesar de ello, en el presente estudio no se realizan correcciones a dichas variables, por lo que se reconoce la posibilidad de tener un sesgo en el proceso de calibración producto de las dificultades que tendría el Figura 4. Coeficiente de escorrentía de caudal observado respecto a precipitación CR2MET versus razón de precipitación CR2MET y ETP. Figura 2. Función de densidad acumulada (CDF) anual de escorrentía (mm d -1 ), precipitación (mm d -1 ), evap. potencial (mm d -1 ), y temperatura (°C). Figura 3. Función de densidad acumulada (CDF) de área de la cuenca (km 2 ), pendiente media (m km -1 ), fracción cubierta por bosque y suelo desnudo (%).

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