Estéticas menores

DESOBEDECER LA AUTEN... Matías Marambio y por la posibilidad del diálogo entre latitudes distintas de un continente compartido. Se trata. en fin. de un ejercicio interpretativo que busca poner a prueba las categorías desde las propiedades formales y materiales de las obras. antes que de una simple ejemplificación de tesis definidas apriorísticamente. l Ahuecar, vaciar, repetir: acciones que se encuentran íntimamente vinculadas a varias de las obras de Calfuqueo. Un ejemplo: los cincuenta Caupolicanes alineados bajo la cobertura del acrílico en Gato porliebre (imagen 1). Tomando como punto de partida la escultura de Nicanor Plaza que hoy se ubica en el cerro Huelén/Santa Lucía. Caltuqueo opta por un desplazamiento en varios niveles. El primero, más evidente, es que no se trata de la escultura emplazada en el cerro. sino de un molde que proviene de una de las muchas imitaciones de la obra de Plaza que conforman la iconografía popular de Caupolicán. A ello hay que sumar. además, la ironía de que Plaza no tenía para nada en mente al toqui mapuche, sino a los indígenas norteamericanos representados en The Last ofthe Mohicans. de James Fenimore Cooper. Su escultura fue. primero, un envío para audiencias europeas y, luego. tras un cambio de nombre, tuvo mayor suerte crítica. al punto de convertirse en el referente obligado de largas cadenas icónicas que llevan hasta el referente tomado por Calfuqueo para hacer sus Caupolicanes colorinches (una figura recogida en una feria popular de Valparaíso). ¿Cuál sería entonces el orden de precedencia entre modelo y copia en este caso? La multiplicación de los objetos requiere de varios moldes y vaciados con tal de experimentar con colores y materiales -y así desestabilizar la imagen de Plaza en la seriedad republicana que se adhirió posteriormente a ella-. Cada nueva pieza requiere de la repetición de un gesto en el cual se llena una matriz para subrayar la condición impostada del punto de partida, sus aspiraciones frustradas y la obnubilación oligárquica con referentes venidos del norte. El 237 ejército multiplicado de Caupolicanes maltrechos. chuecos,