Reescrituras y contraescrituras de la escena de avanzada

193 Reescrituras y contraescrituras de la Escena de Avanzada que la arquitectura filosófica en la que Willy sostiene esta posición radical es digna de ser to- mada en consideración. Pero la maximalización de sus sentencias (“ Ninguna lógica de la trans- formación y descompaginación, de la innova- ción, es posible en el rayano del acontecimien- to” 6 ) operaba un “golpe de fuerza” tan intimidante para la crítica como aquel que se le reprochaba a Márgenes e Instituciones haber ejer- cido treinta años atrás. Es cierto que el texto “El Golpe como consumación de la vanguardia” se escribió bajo la impronta benjaminiana de “la muerte de la intención” o “del final del juicio” que Willy torna equivalente a la “suspensión de la crítica”, en signo de renuencia a cualquier tipo de productividad (incluyendo la productividad crítica de ciertas maniobras de discurso que se pretenden contra-hegemónicas) que, según él, terminarían siéndole funcional a la máquina ca- pitalista que lo reabsorbe todo en su fábrica de simulacros. Por mi lado, en el momento de la polémica, estaba releyendo El retorno de lo real. La vanguardia a finales de siglo (2001): un texto en el que Hal Foster se opone enérgicamente a la “denigración prematura de la vanguardia” y pretende, por el contrario, “recuperar las prácti- cas críticas interrumpidas por el golpe conser- vador de los noventa” 7 como aquellas prácticas que, bajo la forma “específica y deconstructiva” de las neovanguardias, reactivan sus potenciales de expectación para remecer -en diferido- un presente vaciado de toda reserva de memoria resistente. Quizás el desencuentro entre nues- tros textos sobre la relación dictadura-gol- pe-vanguardia-neovanguardia se haya debido a los diferentes horizontes de lectura y los dife- 6 Willy Thayer, El fragmento repetido. Escritos en estado de excepción . Santiago, Metales Pesados, 2006, p. 16. 7 Hal Foster, El retorno de lo real; la vanguardia a finales de siglo . Akal, Madrid 2002, p. 7.