Reescrituras y contraescrituras de la escena de avanzada

181 Reescrituras y contraescrituras de la Escena de Avanzada NR : Un modo de responder a tu pregunta se- ría volviendo al proyecto de la Revista de Crítica Cultural como una revista cultural independien- te que se propuso, entre otros motivos, darles cabida a aquellas “poéticas de lo fragmentario” que eran desechadas por los saberes tecnificados de la cultura transicional que se había puesto al servicio del pacto concertacionista entre re- democratización y neoliberalismo. A lo largo de sus 36 Números (1990-2008), la Revista de Crítica Cultural actuó como una plataforma de resistencia crítica frente a lo que mencionas: el oficialismo del consenso, la despolitización de la ciudadanía, la obliteración de la memoria, la burocracia de las políticas culturales de la tran- sición, la banalidad de su mercado del arte, etc. Varios de los 36 números de la Revista de Crítica Cultural están atravesados por un trabajo de es- critura y visualidad asociado a los experimentos creativos de los años de la Avanzada y firmado por algunas de sus nombres reconocidos (Eu- genio Dittborn, Carlos Altamirano, Diamela Eltit, Lotty Rosenfeld, etc.): unos experimentos visuales y escriturales que se hacían cargo de las sombras y opacidades de la postdictadura para desmarcarse así de la racionalidad tecnocrática del Chile neoliberal y sus lenguajes estandariza- dos por la euforia comunicativa de una sociedad supuestamente “transparente”. No sabría reconstituir con exactitud ni los modos ni los tiempos que organizaron el itine- rario de traspaso de la Escena de la Avanzada a la enseñanza académica de las “cátedras univer- sitarias” porque, entre otras razones, yo nunca hice clases en una Escuela de Arte 2 . La transmi- 2 Cuando Francisco Brugnoli creó la Escuela de Arte de la Uni- versidad ARCIS en los años 80, me invitó a hacerme cargo de un curso de “Antropología cultural” que duró un semestre: un curso que organicé en torno a la “condición fotográfica” en el que