Escultura y contingencia 1959-1973

36 Mario Irarrázabal también fue parte de la muestra. Recientemente llegado desde Alemania donde estudió escultura con Waldemar Otto, participó activamente de los encuentros que Rojas Mix llevaba a cabo en la sede del IAL en Providencia, a los que invitaba a teóricos, críticos y artistas extranjeros, consolidándose como epicentro de la escena artística de la época. Si bien era evidente el compromiso político que motivaba las acciones generadas desde el IAL (según dice Irarrázabal, “todos eran bien políticos, el ambiente en Chile era de mucha efervescencia”), expresa su reconocimiento a Rojas Mix en tanto intelectual, crítico de arte y gestor. Es él quien le extiende la invitación a la exposición a pesar de ser seminarista y de no tener filiación política (lo mismo ocurre con Hugo Marín). Claro que Irarrázabal blandía un compromiso transformador al interior de la Iglesia que le permitía establecer un diálogo y vínculo personal con lo que estaba ocurriendo en Chile. Incluso en la entrevista que Rojas Mix le hace, y que incluye en el catálogo de la exposición, el escultor plantea una incomodidad con su propio trabajo: “me doy cuenta que tengo que cambiar (…) Estoy muy mal, busco lo latinoamericano pero todavía no encuentro a qué aferrarme. Para mí el problema es crear imágenes revolucionarias que sean humanas y tengan alegría” 23 , expresando quizás las tensiones que proponía tanto el bullente contexto social de la época como la propia exigencia de la exposición. Sin embargo, sabemos de la extensa producción de obra de Mario Irarrázabal, la que ha mantenido como constante una perspectiva humanista que aborda los problemas existenciales, sociales y políticos que determinan la sociedad en que vivimos, muchas veces de forma directa, como sobresale en la etapa post golpe militar. 22 Entrevista con Víctor Hugo Núñez . Núcleo Escultura y Contemporaneidad. 2019. 23 Rojas Mix, Miguel, Ibíd. Pág. 81. que les pido es que no se muevan. Estuvieron 5 minutos inmóviles. Y fue de una impresión … todos estábamos esperando. ¡Fue de una carga eso! Al final se van, salen gritando y corriendo, por entre la gente, leyendo un texto, un antipoema” 22 . Escombros, despojos y desperdicios