Estética de la intemperie: lecturas y acción en el espacio público
Estéticas de la Intemperie 266 medio de un circo del que alguna vez fue la gran atracción, el espectáculo era la precariedad de su cuerpo que día a día adelgazaba ante la vista admirada, luego burlona, él pensó que siempre fascinada de cientos de morbosos visitantes. En algún momento la pizarra que marcaba el espectacular paso de los días de ayuno fue olvidada por los funcionarios del circo y nadie salvo él celebraba su inexorable triunfo. ‘Un pequeño estorbo en todo caso, un estorbo que cada vez se hacía mas diminuto. Las gentes se iban acostumbrando a la rara manía de pretender llamar la atención como ayunador en los tiempos actuales, y adquirido este hábito, quedó ya pronunciada la sentencia de muerte del ayunador. Podía ayunar cuanto quisiera, y así lo hacía. Pero nadie podía ya salvarle; la gente pasaba por su lado sin verle. ¿Y si intentaba explicarle a alguien el arte del ayuno? A quién no lo siente, no es posible hacérselo comprender’. Franz Kafka, Un artista del hambre Pintura Negra / Intemperie, Francisco Sanfuentes.
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